El Hidrógeno Verde se posiciona como una energía alternativa de futuro que ya está empezando a dar resultados y en cuya mirada los países del mundo empiezan a planificar sus políticas de desarrollo.

En ese contexto, ¿qué países están más avanzados en el mundo? ¿Cómo se encuentra América Latina? ¿Y Uruguay?

Esta es la respuesta que otorgó ChatGPT:

Los países que están liderando el desarrollo del hidrógeno verde a nivel global incluyen a China, la Unión Europea, Japón, Corea del Sur, India y Estados Unidos.

  1. China es actualmente el mayor productor y consumidor de hidrógeno en general. Aunque la mayoría de su producción sigue siendo «hidrógeno gris» (generado con combustibles fósiles), el país ha lanzado más de 30 proyectos de hidrógeno verde desde 2019 y está avanzando en el desarrollo de vehículos y camiones con pilas de combustible.
  2. La Unión Europea está comprometida con el hidrógeno verde como parte de su Acuerdo Verde Europeo, con el objetivo de instalar 40 gigavatios de capacidad de electrolizadores de hidrógeno renovable para 2030. La UE ha establecido la Alianza Europea para el Hidrógeno Limpio para fomentar la inversión y el desarrollo en este sector.
  3. Japón fue el primer país en formular una estrategia nacional para el hidrógeno en 2017, con la ambición de convertirse en la primera «sociedad del hidrógeno» del mundo. A pesar de no tener suficientes recursos naturales para producir hidrógeno verde a gran escala, está desarrollando acuerdos internacionales para su importación y ha establecido objetivos significativos en el uso de vehículos eléctricos de pila de combustible.
  4. Corea del Sur ha incluido el hidrógeno limpio en su «Green New Deal» con el objetivo de tener 200,000 vehículos de pila de combustible en circulación para 2025 y aumentar significativamente el uso del hidrógeno en su matriz energética para 2040.
  5. India ha lanzado la Misión Nacional del Hidrógeno con la meta de impulsar la producción de hidrógeno verde como una estrategia para alcanzar la independencia energética para 2047.
  6. Estados Unidos está apostando por el hidrógeno con una fuerte inversión gubernamental a través de la Infrastructure Investment and Jobs Act de 2021, que incluye un presupuesto de 9,500 millones de dólares para el desarrollo del hidrógeno limpio. Además, se ha lanzado el programa «Hydrogen Earthshot» para reducir el costo del hidrógeno a 1 dólar por kilogramo en una década.

Además, otros países como Australia, Chile, Marruecos y Namibia también están emergiendo como jugadores importantes en el mercado del hidrógeno verde, buscando diversificar sus economías y aprovechar las oportunidades de exportación.

Estos esfuerzos reflejan un compromiso global creciente para adoptar el hidrógeno verde como una solución clave en la transición energética y la descarbonización de sectores industriales y de transporte​ (Foro Económico Mundial)​(iElektro).

¿Y en América latina?

En América Latina, Brasil y Chile son los países que están liderando el desarrollo del hidrógeno verde.

Brasil ha avanzado significativamente con políticas para promover el hidrógeno bajo en carbono. En agosto de 2023, el país aprobó un nuevo marco legal para establecer una política nacional de hidrógeno, que incluye un sistema de certificación y un régimen especial de incentivos para la producción de hidrógeno verde. Se espera que estas medidas ayuden a desplegar instalaciones de producción de hidrógeno con bajas emisiones, promoviendo la innovación y el crecimiento del sector energético verde en el país​ (IN Iguazú Noticias).

Chile, por su parte, ha establecido un marco regulatorio estable y está promoviendo alianzas público-privadas para acelerar su transición hacia la energía verde. El país ha desarrollado planes para expandir su infraestructura de transmisión de energía, aunque aún enfrenta desafíos en cuanto a la estabilidad del suministro de energía renovable. Chile también busca posicionarse como un exportador clave de hidrógeno verde, aprovechando sus condiciones naturales favorables para la producción de energías renovables ​(IN Iguazú Noticias).

Además, la región enfrenta desafíos comunes como la falta de demanda, la necesidad de desarrollar infraestructura específica para el hidrógeno y la capacitación de una fuerza laboral adecuada para este sector emergente. El Foro Económico Mundial ha identificado áreas clave para superar estos retos, como la estandarización de normas técnicas, la reducción de costos de producción y transporte, y la creación de demanda tanto local como internacional​ (Foro Económico Mundial).

El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) también ha lanzado un sistema voluntario de certificación de hidrógeno para América Latina y el Caribe, en el que más de 10 países han mostrado interés. Este sistema busca garantizar la sostenibilidad ambiental y social del hidrógeno producido en la región, impulsando su competitividad en el mercado mundial​ (BID Blog).

Estos esfuerzos colectivos sugieren que, aunque aún hay desafíos por superar, América Latina está bien posicionada para desempeñar un papel importante en el desarrollo global del hidrógeno verde.

¿Cómo se posiciona Uruguay?

Uruguay se posiciona como un actor relevante en el desarrollo del hidrógeno verde en América Latina. Con un sector de energías renovables altamente desarrollado —el 97% de su matriz eléctrica proviene de fuentes renovables como la hidroeléctrica, eólica y biomasa—, el país está bien preparado para aprovechar sus recursos naturales para la producción de hidrógeno verde a gran escala.

Uno de los proyectos más importantes en Uruguay es el Tambor Green Hydrogen Hub, que se encuentra en la fase inicial y está siendo desarrollado en colaboración con la empresa alemana Enertrag. Este proyecto tiene como objetivo la construcción de plantas eólicas y solares con una capacidad de 350 MW en Tacuarembó, y la producción de e-metanol, un derivado del hidrógeno verde que se espera compense una parte significativa de la demanda de metanol en Europa. Alemania ha mostrado gran interés en este proyecto como parte de su estrategia para reducir la dependencia de combustibles fósiles importados, especialmente tras la guerra en Ucrania ​(H2LAC).

Además, Uruguay tiene un potencial significativo para la exportación de hidrógeno verde y sus derivados, con proyecciones de ingresos anuales de hasta 2.100 millones de dólares para 2040, similares a sus exportaciones actuales de carne bovina. Este desarrollo podría generar más de 35,000 empleos directos en sectores como la construcción de plantas, operación, mantenimiento, logística y educación técnica ​(Forbes Uruguay).

El país también cuenta con proyectos de gran envergadura como la inversión de 4.000 millones de dólares por parte de HIF Global para la producción de 180,000 toneladas de gasolina sintética por año en el complejo agroindustrial de Paysandú. Este proyecto será la mayor inversión privada en la historia de Uruguay y se espera que comience en 2025​ Forbes Uruguay).

En resumen, Uruguay se perfila como un líder emergente en la producción de hidrógeno verde en la región, con un marco regulatorio favorable, infraestructura adecuada y recursos naturales de alta calidad. Esto le permitirá no solo descarbonizar su economía, sino también convertirse en un exportador neto de hidrógeno verde y sus derivados a nivel global ​(Gub.uy).

Fuente Imagen: Comunicación Presidencial.