El ministro de Defensa Nacional, Eleuterio Fernández Huidobro afirmó que “en el Ministerio de Defensa Nacional estamos sometidos a una lucha despiadada por la mano de obra calificada”, y sugirió la posibilidad de legislar para establecer un cumplimiento de contratos y evitar que el personal renuncie en cualquier momento.

“La economía está funcionando bien, falta mano de obra y la que está calificada tiene una fuerte demanda. Lo que está sucediendo hoy con los pilotos de la Fuerza Aérea es algo dramático porque, además, muestra una tendencia creciente. Lo mismo sucede con el personal especializado como, por ejemplo, los mecánicos, cuya formación representó para las Fuerzas Armadas y el Estado muchos años e inversión”, expuso como ejemplo el jerarca al asistir el lunes 12 de setiembre a la Comisión de Defensa del Senado.

Fernández Huidobro indicó que “eso también pasa en otros rubros ya que las personas se van por su propia cuenta o las vienen a buscar, dándose así un fenómeno desgraciado muy similar a lo que sucedió hace poco tiempo con un jugador de fútbol, que tuvo una enorme repercusión pública. Respecto a esto, se produjo un torrente de letras y se llegó al punto de que algunos dijeran que había que hacer una ley para impedir que una situación así volviera a ocurrir”.

“Dicen que una vez una persona le dijo a otra que esto lo genera la economía y la vieja ley de la oferta y la demanda”, agregó.

Para el secretario de Estado “nos parece que esto es algo injusto porque, tal como hemos averiguado, en otros países un piloto de la Fuerza Aérea no se puede ir por un período de siete años. Esa es una ley vigente y, de la misma forma, tampoco puede irse un soldado que firmó un contrato por dos años a menos que se lo autorice porque, si lo hiciera, incurriría en el delito de deserción”.

Asimismo, “no quiero meterme con otras profesiones donde pasa algo parecido: el Estado paga y paga, ‘forma y forma’, para que después quienes no pusieron un peso se lleven esa capacidad. En el caso de la Fuerza Aérea y de la Fuerza Aérea Naval no solo se entrena personal para la guerra, sino también para operaciones de búsqueda y rescate que solamente ese personal puede realizar”.

Expuso como ejemplo que “hay que preparar a un piloto de helicóptero para que pueda proceder en esas operaciones. El otro fin de semana se rescató, casi a 400 kilómetros de la costa, a un pescador que estaba enfermo y luego se lo internó en el Sanatorio Mautone. También se rescataron personas a las que se les había dado vuelta la lancha en  la Represa de Palmar”.

Puntualizó que “esas operaciones, en climas generalmente adversos, no las puede realizar cualquier piloto o persona que sepa manejar una plataforma voladora. Por lo tanto, la formación de esas personas no tiene solo un valor monetario -que la Fuerza Aérea tiene perfectamente calculado en moneda real contante y sonante y actualizado- sino otro valor porque si el Uruguay no contara con esta posibilidad, no se podría haber hecho con todo éxito un trasplante de corazón como ocurrió el otro día, porque como saben los senadores esto nadie lo puede prever y sin embargo tiene que ser rápido, perfecto e impecable”. Por tanto, “para que no se pierda ese recurso tan valioso, se necesitan aviadores avezados, capaces de volar y volver más allá de las condiciones climáticas”.

Tarjeta Azul de la UE

El titular de Defensa Nacional, Eleuterio Fernández Huidobro sostuvo que la fuga de recursos humanos también se está dando desde el exterior.

“Aclaro que ya hace un tiempo que esto viene sucediendo en forma dramática, tanto en el ámbito del Estado como en el de las empresas privadas”.

Señaló que “también desde el exterior se está produciendo una lucha despiadadamente descarnada, que se ha planteado en documentos públicos o por medio de institutos como la Tarjeta Azul, inventada hace poco por la Unión Europea y que permite el ingreso a esa zona con alfombra roja, de toda la materia gris proveniente del Tercer Mundo. Así lo reza en sus documentos estratégicos el Ministerio de Relaciones Exteriores de Alemania, argumentando que esto es más barato. Perdónenme el énfasis, pero esto es lo que nos está pasando”.

En el caso de Uruguay, puntualizó, “se han llevado médicos y hasta equipos completos de medicina al exterior. Esto sigue sucediendo y, naturalmente, también ocurre en las Fuerzas Armadas”.

Fuente Imagen: infodefensa.com