Andrés Berterreche, el Ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca señaló que desde el sector agricultor se esperaba una cosecha récord de cultivos de invierno como cebada y trigo -700 mil hectáreas-, pero el exceso de aguas pluviales experimentadas en los últimos días dificultó los controles que se realizan en las plantaciones.
Esta demora facilitó el brote, en ciertos trigos, de un hongo que les puede hacer perder calidad y rendimiento en las cosechas. Con este panorama, el Ministro explicó que sólo queda esperar al retroceso del agua en las zonas inundadas para analizar en qué situación están las cosechas, para posteriormente tomar la medidas pertinentes, según el caso que se presente.
Entre las medidas a tomar en estos casos, Berterreche explicó que lo más lógico es promover la interacción público-privada que analice y tome las decisiones correspondientes. A su entender, más allá de los daños provocados por las últimas lluvias, el país debería tener una visión más profunda y seria de lo que es la gestión del riesgo agropecuario, para no tener que “correr todo el tiempo atrás de una seca de una inundación, de un aumento de precios o de insumos”. Esto amerita una discusión a nivel país, dijo y añadió al mismo tiempo que la correcta planificación es lo que permitirá el desarrollo de la actividad agropecuaria. Asimismo, recordó que ya existe un fondo agropecuario de emergencia, implementado por este gobierno, que se ejecutó en la época de la sequía, pero a lo que se aspira es a evitar los daños, no a actuar luego de las catástrofes. “Por eso tenemos que tener un paquete de herramientas conjuntas para anticiparnos”, puntualizó
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