El subsecretario del Ministerio de Ambiente (MA), Gerardo Amarilla consideró que en el tema del cambio climático, Uruguay “puede hacer un gran aporte a la sociedad, no para ser modelo de nadie, no para ser ejemplo de nadie, si no para ser respetados como nación chica pero que mantiene una línea histórica de trabajo y de seriedad, en el tema ambiental y en el tema climático”.
Sus conceptos fueron efectuados este jueves 17 durante una conferencia titulada “Uruguay y sus compromisos internacionales en materia ambiental. Cambio Climático”, organizado por Fundación Konrad Adenahuer (KAS Montevideo) y el CURI (Consejo Uruguayo para las Relaciones Internacionales), y que contó con la presencia del embajador de Alemania en Uruguay, Eugen Wollfarth, el embajador de la Unión Europea en nuestro país, Karl-Otto KÖNIG, y Natalie Pareja, Directora de Cambio Climático del MA, entre otros, y fue transmitida vía Zoom.
Además de Amarilla, también fueron ponentes: Mariana Kasprzyk, Coordinadora de Cambio Climático del Ministerio de Ambiente, Roberto Marvid, Coordinador de Ozono del Ministerio de Ambiente, y Michael Carroll, Especialista en manejo de recursos naturales del Grupo de Países Productores del Sur (GPS).
Amarilla indicó que “estamos aquí en un gran desafío al hablar de ambiente y de cambio climático en un momento muy especial en la historia de la humanidad. Nos está pasando y cada uno tiene su vivencia personal de cómo ha llevado este COVID, esta situación especial que el planeta ha vivido y que es una especie de pandemia con ‘reality show’, es una mezcla que nos ha paralizado todo a partir de marzo de este año y nos ha hecho reflexionar sobre las cosas importantes”.
Agregó que “siempre lo decimos: uno tiene que dejar de estar corriendo atrás de lo urgente y comenzar a centrarse en lo importante y esta pandemia, si de algo nos sirve como humanidad es tratar de despejar todo aquello que nos distrae, todo aquello que, en portugués “atrapalha”, aquellos que nos enreda, y nos centramos en las cosas importantes, lo que tiene sentido. Y vaya si el tema ambiental es uno de los temas que tiene sustancial importancia.”
Destacó que “Uruguay crea este año por la Ley de Urgente Consideración (LUC) el Ministerio de Ambiente que es un viejo anhelo, ya estaba como iniciativa hace varios años en el Parlamento, se había planteado en varias oportunidades también en los programas electorales en varias instancias pero en esta ocasión surge la posibilidad que varios partidos ya lo incluyen en su Programa de Gobierno y la ciudadanía en definitiva termina consagrando aquel programa de aquel candidato que tiene una fuerte presencia en la creación del Ministerio de Ambiente, que no es más que darle una jerarquía ambiental al tema.”
Comentó que “independientemente de los partidos, a veces existe incomprensión en los temas ambientales cuando nos enfrentamos a intereses o a gente que no le da tanta importancia al tema y le quita jerarquías a los temas ambientales”.
Recordó que “la vieja Comunidad Europea en el año 1978 ya establecía en algunos documentos que las políticas productivas, económicas, de desarrollo, tienen que estar supeditadas a los temas ambientales. En el año 1978.”
Amarilla dijo “Uruguay incluye en el año 1990 la creación del Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, en 1994 la Ley de Impacto Ambiental y comienza a generar la legislación ambiental pero en un momento en donde el país no tenía grandes conflictos ambientales.”
Conflictos ambientales
Para el subsecretario de MA, “los conflictos ambientales comienzan en la década del 2000 comienza el tema ambiental a estar muy presente en la agenda pública uruguaya y pasaron los años y hoy tenemos grandes temas que nos afectan como sociedad y como país y, si bien el cambio climático, todos sabemos que es un tema de afectación global, el aporte uruguayo –los técnicos van a hablar- es muy menor, no es menor las afectaciones que tenemos como país: las sequías, las inundaciones, los temporales, los sucesos climáticos que estamos sufriendo como resultado de ese cambio climático que nos afecta claramente como sociedad.”
A su entender, “esta crisis supone para el país en esta situación de pandemia y en esta nueva institucionalidad que se ha creado, asumir un rol protagónico y de liderazgo. Si bien, hoy por hoy, más que afectadores, más que grandes responsables de lo que pasa en el mundo, somos víctimas, también tenemos la responsabilidad que nuestra conducta, por menor que sea, debe ser en ese mar una gota que debe aportar como sociedad y como país al mejoramiento de la conducta humana frente al cambio climático.”
Por tanto, “ahí tenemos grandes desafíos, algunos de los cuales hemos cumplido con nota. Yo estuve en Alemania hace algunos años invitado por la KAS y realmente estaban asombrados los que estaban allí de varios países cómo Uruguay había transitado el cambio en la matriz energética a partir de un acuerdo multipartidario (gobierno y oposición), y todos transitamos un camino por el cual somos hoy mirados con respeto y ejemplo en lo que hemos hecho con el cambio de la matriz energética que, en realidad, no se condice con algunas prácticas que hoy tenemos de seguir buscando hidrocarburos y permitiendo que se busque hidrocarburos en nuestro territorio. En verdad es una práctica que deberíamos abandonar.”
Según Amarilla “no podemos seguir buscando petróleo acá, debemos pensar que estamos en otro mundo y vamos en otro sentido.
Junto con eso tenemos desafíos importantes en el tema movilidad eléctrica, en lo que es la transformación del transporte, un tema muy importante que los partidos ya lo comienzan a colocar en la agenda pública y ojalá podamos avanzar en la agenda pública en ese sentido.”
Como consecuencia, “tenemos por delante un trayecto importante, no por lo que pueda significar cuantitativamente el aporte de Uruguay pero cualitativamente es un aporte que hacemos a la sociedad. Cuando uno se pregunta hablando de las cosas importantes para qué vive, uno tiene que pensar que vive para los demás, en definitiva lo importante es el propósito que tiene uno en la vida para servir al prójimo. Y como naciones también tenemos propósitos, como colaboramos y cooperamos con los demás”.
Amarilla evaluó que “el Uruguay tiene, así como lo hicimos con el tema pandemia, que hoy está siendo también mirado con respeto y con admiración sobre cómo ha llevado la situación sin perjudicar al hecho de la libertad pero con la responsabilidad hemos logrado – a pesar de algunas noticias preocupantes- ese camino de libertad con responsabilidad, en definitiva de afirmar eso que ya desde hace algunos años hemos querido establecer, y es que queremos ser conocidos en el mundo como ‘Uruguay Natural’”. En ese sentido –añadió- “ahí tenemos una gran responsabilidad y en este tema del cambio climático hacer un gran aporte a la sociedad, no para ser modelo de nadie, no para ser ejemplo de nadie, si no para ser respetados como nación chica pero que mantiene una línea histórica de trabajo y de seriedad, en el tema ambiental y en el tema climático, reconocidos como un país que ha cumplido con sus compromisos internacionales y que marca un sendero sobre cómo se debe relacionar el ser humano con el ambiente y con el mundo.”
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