Una visión realista y de esperanza. Esta es la visión interesante del reconocido coach Carlos Durán que nos aporta sabiduría y entendimiento en un mundo más complicado y complejo.
¿A quién puedo acudir? ¿En quién puedo confiar?
Compartimos su edificante columna.
Este es un mundo más complicado y complejo donde si algo es seguro es la incertidumbre y el cambio. Si hay una emoción que predomina es el miedo, que algunos a propósito alimentan para que las personas cambien su libertad y la verdad por un poco de seguridad. Este es un mundo más fragmentado y dividido, donde la grieta se produce por temas políticos, sanitarios, económicos y religiosos. Y nos lleva más fácilmente a discusiones y enfrentamientos con nuestros amigos y familiares. Este es un mundo difícil, son tiempos peligrosos para vivir y aún para liderar. Es como navegar en un velero en medio de aguas turbulentas y porqué no tormentosas.
Pero creo que si hay esperanza. Dos aspectos fundamentales:
1. Inteligencia Emocional. Es la capacidad de gestionar nuestras emociones, de poder tener paz en medio de la tormenta. De no permitir que el miedo y la ansiedad nos gobierne sino de mantener el entusiasmo y la motivación en medio la incertidumbre y los cambios. Y también como líderes, ayudar a otros a gestionar sus emociones positivamente.
2. Inteligencia Espiritual. Es entender que somos seres con una profunda necesidad espiritual y que es sabio apoyarnos en Dios para poder navegar con éxito y llegar a buen puerto en estos tiempos peligrosos y tormentosos. Jesús dijo: «No tengan miedo, no se turbe su corazón. Crean en Dios, crean en mi…. Mi paz les dejo, mi paz les doy, no dejen que nada les robe la paz». Ser inteligentes espiritualmente es permitir que Jesús como nuestro gran Capitán, tome el timón del barco de nuestra vida y nos ayuda a llegar a un buen puerto.
Considera lo que sucede en este mundo y lo que sucede en ti. Dios tiene un plan maravilloso con tu vida, y ese plan incluye paz en medio de las circunstancias. La capacidad de gestionar con éxito las tormentas de la vida. Vale la pena creer y confiar en Jesús!!!!!