Es una de las grandes preguntas que está de moda a la hora de analizar el avance y el alcance de la Inteligencia Artificial (IA): ¿puede sustituir las emociones humanas?
En su respuesta, la propia IA es categórica y contundente y por ahora nos deja un poco más tranquilos: “No puede replicar la experiencia humana de tener emociones y sentimientos genuinos”.
De seguro que la IA suplantará un número significativo de puestos de trabajo, creará otros, millones seguramente quedarán a la vera del camino, relegados por no poder convivir en este nuevo mundo que se abre.
Y ante tanta transformación, metamorfosis, resurrección continua de nuevos datos y respuestas, la pregunta se repite cada día de forma más insistente: ¿podrá la Inteligencia Artificial suplantar la emoción humana?
Pero, vayamos por parte, y en primer lugar, preguntarnos y, si vale ceder la derecha a que la propia IA se conteste y defina a sí misma, según el ChatGPT, el un prototipo de chatbot de inteligencia artificial desarrollado en 2022 por OpenAI que se especializa en el diálogo, sobre ¿en qué se basa la IA?
“La Inteligencia Artificial (IA) se basa en la creación de algoritmos y sistemas computacionales que puedan simular la inteligencia humana en tareas como el aprendizaje, la resolución de problemas y la toma de decisiones. La IA utiliza técnicas de la ciencia de la computación, la estadística, la lógica y la psicología cognitiva para desarrollar modelos y algoritmos que puedan analizar grandes cantidades de datos, identificar patrones y tomar decisiones basadas en la información disponible.
Además, la IA también se basa en el uso de redes neuronales artificiales y algoritmos de aprendizaje automático, que permiten a las computadoras mejorar su rendimiento en una tarea determinada a medida que se les presenta más información. La IA también puede incorporar técnicas como el procesamiento del lenguaje natural, la visión por computadora y el reconocimiento de voz para permitir a las máquinas interactuar con los humanos de una manera más natural y efectiva.
Y la pregunta del millón, como se suele decir cotidianamente: La IA ¿puede sustituir las emociones humanas?
De esta forma responde la revolucionaria mega aplicación:
“No, la IA no puede sustituir las emociones humanas. Aunque la inteligencia artificial ha avanzado significativamente en áreas como el procesamiento del lenguaje natural y el reconocimiento de imágenes, las emociones son una característica exclusivamente humana. Aunque es posible programar una máquina para que imite las emociones humanas, no serían genuinas, ya que las emociones humanas son el resultado de complejas interacciones bioquímicas y psicológicas en el cerebro.
Sin embargo, la IA puede ser programada para procesar y analizar datos relacionados con las emociones humanas, como el reconocimiento de emociones en el lenguaje y la expresión facial. Estas capacidades pueden ser útiles en campos como la psicología, la publicidad y el análisis de sentimientos en las redes sociales. Pero en última instancia, la IA no puede replicar la experiencia humana de tener emociones y sentimientos genuinos”.
Fuente Imagen: https://computerhoy.com/