Pensando en las personas con discapacidad, el grupo Dalavuelta ha creado bicicletas inclusivas o llamadas “bicisillas”, los cuales son pequeños vehículos elaborados con la finalidad de que sean seguras, económicas y simples.
En Uruguay, todavía existe una gran brecha en lo que respecta a programas de inclusión social de diferentes tipos. Pero gracias a este invento, aquellos que poseen impedimento para movilizarse con sus extremidades inferiores, podrán pasear cómodamente junto a otra persona y no más por delante o detrás de su acompañante como solía hacer.
Este trabajo fue desarrollado en base a comentarios que recibió Dalavuelta, provenientes del Centro de Rehabilitación Casa de Gardel, de ASSE, la Asociación Uruguaya de Parkinson (AUP), y la Asociación Pro Recuperación del Inválido (APRI).
Este modelo se creó junto a estudiantes de terapia ocupacional, ingeniería mecánica y fisioterapia.
En su página de Facebook, ellos refieren que Dalavuelta “es un espacio conformado por docentes y estudiantes de diferentes facultades de la Universidad de la República, dedicados a innovar el diseño y desarrollo de ayudas técnicas de bajo costo para personas en situación de discapacidad”.
Esta bicicleta inclusiva tiene dos formas de ser usada. La primera consiste en retirar el asiento y subir la silla de ruedas por atrás, para luego cerrar una baranda y está lista para usarla.
La otra forma es usar un asiento y respaldo con barandas. Esto puede ser utilizado por personas de cualquier edad y dificultad: desde una persona que usa muletas hasta un adulto mayor.
Algo que fue de imprescindible para el equipo creador fue la seguridad en el diseño, por lo que fue menester implementar ciertos cambios, ya que los agarres que se habían colocado al inicio “no daban sensación de seguridad”, según uno de los creadores.
En Latinoamérica, el país pionero en elaborar este tipo de vehículos inclusivos fue México. Amadeo Medina, diseñador industrial de profesión y su esposa Vanessa Valencia dedicada también al mismo rubro, crearon una bicicleta especialmente para personas con esta condición.
Ellos elaboraron una bicicleta desmontable para silla de ruedas, y la denominaron DT Bike, Diseño para Todos (DT). Su concepto principalmente es crear un medio de transporte seguro y cómodo para ellos.
La seguridad depende de muchas cosas, como los agarres, los cuales deben estar al rápido alcance y tener una superficie antideslizante.
Asimismo, se debe controlar la velocidad, como en cualquier otro vehículo de ruedas, además, que sea resistente a los cambios de clima y que pueda ubicar la dirección del usuario por si no sabe dónde está.
Para esto será necesario la implementación de un velocimetro para bicicleta con conexión GPS y resistencia al agua, además de una batería duradera.
En Uruguay ya se han construido seis “Bicisillas”, son las primeras y se podría decir que son prototipos. El grupo Dalavuelta, mencionó que se había tardado un mes en ensamblarlas por completo, añadió también, que la inversión por cada una fue de 18 mil a 19 mil pesos.
Fuente Imagen: elorden.com