Agencia PARLASUR (18/10/2019). En la pasada LXVIII Sesión Ordinaria, el pleno del Parlamento del MERCOSUR aprobó una Declaración de profunda preocupación con la nueva escalada de ataques y operaciones militares unilaterales contra poblaciones civiles de las regiones autónomos kurdas, particularmente en la frontera de Turquía y Siria.
El Parlamentario uruguayo Roberto Chiazzaro expresó que “esta Declaración es sobre la honda preocupación al respecto de la injustificada acción del Estado Turco en contra de la población Kurda. Una población que fue fundamental en el combate y derrota del ISIS. Creemos que se debe cesar esta persecución étnica en contra de la población kurda.”
La fundamentación de la Declaración apunta a los impactos de los derechos humanos de las poblaciones civiles kurdas provocadas por operaciones militares de Turquía, además de las consecuencias de una posible etapa de desestabilización bélica y de reforzamiento de agrupaciones militares extremistas vinculadas al auto denominado Estado Islámico (ISIS).
Por su parte, la Parlamentaria argentina Julia Perié mencionó especialmente a las mujeres kurdas que luchan por su causa. “Incluso hemos recibido a sus representantes en el Parlamento. No solo han podido organizarse, si no que se encuentran en las montañas, armadas, luchando en contra de un régimen que las oprime. Quiero manifestar nuestro apoyo a esas mujeres, a esas luchadoras”, dijo Perié.
A finales de 2012, un grupo de guerrilleras kurdas decidió pasar a la acción militar y reconquistar del ISIS el territorio del norte de Siria, parte del Kurdistán. Para eso crearon las YPJ, siglas en kurdo de las Unidades Femeninas de Protección, una organización militar cuya la única condición para pertenecer es ser mujer. A inicios de 2018, según la agencia Reuters, las YPJ ya contaban un grupo de más de 30.000 integrantes.
La Declaración indica aún a la realización de un llamado al cese inmediato de las operaciones militares por parte del Estado Turco en la región, así como rechaza a la persecución étnica sobre la población kurda, bajo el pretexto de seguridad militar fronteriza de Turquía.
Finalmente, el Parlamentario brasilero Arlindo Chinaglia concordó con la Declaración, añadiendo la “necesidad de hablar sobre la situación de Siria, que también está expuesta de ser atacada”.
¿Quiénes son los kurdos?
El pueblo kurdo es la minoría étnica sin Estado propio más importante de Medio Oriente.
Se estima que su población oscila entre los 25 y 35 millones de personas que viven en una región montañosa cuyo territorio está repartido entre cuatro países: Turquía, Irak, Irán y Siria, y un pequeño enclave en Armenia.
Es un pueblo unido por una lengua propia y una cultura milenaria. La mayoría de los kurdos son musulmanes sunitas, pero muchos siguen otras religiones y creencias.
Desde principios del siglo XX muchos kurdos sueñan con el reconocimiento del Kurdistán como nación propia.
Pero cuando se firmó el Tratado de Lausana en Suiza, que estableció en 1923 las fronteras de la Turquía moderna, no se consideró la formación de un Estado Kurdo, y desde entonces cualquier intento de crear un estado independiente ha sido reprimido.
¿Por qué Turquía ve a los kurdos como una amenaza?
Hay una arraigada hostilidad entre el Estado turco y los kurdos del país, que constituyen entre el 15% y el 20% de la población.
Los kurdos han denunciado en numerosas ocasiones un trato hostil por parte de las autoridades turcas.
En respuesta a levantamientos en 1920 y 1930 muchos kurdos fueron reubicados, sus nombres y vestidos tradicionales prohibidos, el uso de la lengua kurda restringido y su identidad étnica negada, designándoles «turcos de la montaña».
En 1978, Abdullah Ocalan estableció el PKK (Partido de los Trabajadores de Kurdistán), que reclamó la creación de un Estado independiente dentro de Turquía.
Seis años después, el grupo comenzó una lucha armada y, desde entonces, más de 40.000 personas han muerto y cientos de miles han sido desplazadas.
En la década de 1990, el PKK redujo su demanda de independencia y en lugar de ello pidió una mayor autonomía cultural y política, pero continuó combatiendo.
En 2013, se logró un cese del fuego después de llevarse a cabo negociaciones secretas.
La tregua colapsó en julio de 2015, después de que una explosión suicida de la que mató a 33 jóvenes activistas en la ciudad de mayoría kurda de Suruc, cerca de la frontera Siria.
El PKK acusó a las autoridades turcas de ser cómplices y atacó a cuerpos policiales y militares turcos.
Subsecuentemente, Turquía lanzó lo que llamó una «guerra sincronizada contra el terror» contra el PKK y EI.
Desde entonces, varios miles de personas, incluidos cientos de civiles, han muerto en enfrentamientos en el sureste de Turquía.
Con informaciones BBC y EL PAIS.
Lea la Declaración en:
Fuente Imagen: bbc.com