Este próximo martes 27 de febrero a las 18 horas en la sala de reuniones de Oficinas Centrales, sesionará el Consejo Delegado Académico (CDA). En esta instancia se tratará el futuro del ProCES, Convenio entre Universidad y Consejo Educación Secundaria (CES), por el cual los funcionarios de la Udelar, tanto de los Servicios como del Hospital de Clínicas, pueden acceder a cursos de las materias que tienen pendientes para finalizar la educación Secundaria.
Por medio de este programa, que tiene ya cinco años, han finalizado secundaria más de 200 compañeros y a han culminado sus estudios secundarios muchos de ellos iniciando desde primer ciclo. Los resultados son tan positivos que el mismo Rector los ha destacado.
Pese a esto el Pro-Rector de Gestión Gustavo Giachetto, ha promovido el desmantelamiento de este programa, al igual que lo ha hecho con todas las conquistas en cuanto a formación y capacitación para los funcionarios en la Udelar. Así es que logró que la Directiva del ICF apruebe a finales 2017 una enmienda al Convenio entre Udelar y CES, que no es más que la restricíon del ProCES a su minima expresion durante el 2018 y la eliminación completa del programa para los próximos años.
Esta enmienda ahora es elevada al CDA para su aprobación final, depende de nuestra movilización evitar se apruebe y defender que el ProCES, al menos mantenga los criterios de funcionamiento que hasta ahora, habilitando el egreso de quienes aún tienen materias pendientes e incorporando a los más de 150 aspirantes que desean ingresar para poder terminar Secundaria.
El Pro-Rector de Gestión no tiene argumentos para congelar el ProCES, más que su constatada voluntad de recorte y ataque a los derechos de los trabajadores. Pues el Convenio Udelar – CES es de validación automática cada 2 años y medio, basta no modificarlo para que se mantenga. Los recursos asignados para la contratación de los docentes de Secundaria son $1.400 millones de pesos asignados al ProCES, por tanto no es posible argumentar la falta de fondos.
Sin argumentos sólidos que justifiquen la rediscusión del ProCES, han recurrido a vulgaridades como afirmar que los funcionarios se inscriben en el programa para obtener los boletos subvencionados, y ni se preocuparon de averiguar que este derecho no se nos otorga. No podemos más que concluir que esta es otra medida de la política de ajuste de las autoridades de la Udelar en sintonía con el ajuste del gobierno. Casos similares suceden en todo el Estado. Nuestro sindicato y los hermanos/as de la UTHC no nos quedaremos de brazos cruzados, vamos a dar pelea para defender el derecho conquistado a estudiar y finalizar los estudios secundarios.