El curso, realizado en la Base General E. Garzón, fue coordinado por la Oficina de Cooperación de Defensa de la Embajada de los Estados Unidos y la Guardia Nacional de Connecticut de los EE.UU., bajo los auspicios y la financiación de la Iniciativa Global de Operaciones de Paz.
Junto con los entrenadores estadounidenses llegó al Uruguay Kira, un perro entrenado en las tareas militares especialmente en la detección de explosivos y formación de patrullas.
Este tipo de entrenamiento permite el uso de perros en apoyo de diferentes misiones militares incluyendo operaciones de mantenimiento de paz y misiones de seguridad nacional como la detección de explosivos, detección de narcóticos, y búsqueda y rescate.