«El Ministerio de Salud Pública termina de consolidar las cifras de mortalidad infantil de 2015», dijo el ministro Basso en el Consejo de Ministros ante la audiencia ciudadana que se hizo presente en la carpa levantada en el barrio Sauzal.
Basso dijo que el indicador de mortalidad infantil en el mundo es muy importante, porque hace referencia al control del embarazo, a la calidad de las prestaciones en el sector salud y también es un indicador de referencia en cuanto a la calidad de las políticas públicas, en particular, en cuanto a la eficacia en materia de disminución de pobreza, indigencia y mejor calidad de la población.
Destacó que en 2015 la mortalidad infantil se ubicó en 7,4 por cada 1.000 nacidos vivos, el más bajo indicador desde que se llevan estos registros en Uruguay.
El ministro calificó este hecho como excelente. En ese sentido, citó que en Rivera, en el año 2005 la mortalidad infantil llegaba a 21,7 por 1.000 nacidos vivos y hoy esas cifras son sustantivamente menores.
En esa línea, el funcionario afirmó que este departamento está por debajo de este promedio, porque en 2015 se ubica en 6,8 por 1.000.
Aseguró que es una noticia que trasciende el sector salud, porque tiene relación directa con las políticas públicas para la población y también involucra la calidad de cada uno de los prestadores de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), al control del embarazo, al control en las maternidades, a los controles perinatales, para lo que hay que seguir trabajando para disminuir las cifras actuales en mortalidad infantil.