“Es necesario buscar caminos para ofrecer a nuestros profesionales una salida decorosa rumbo a la jubilación definitiva. El médico tiene una tarea muy desgastante, y no es bueno que con el pasar de los años continúe arriba de una ambulancia. Debemos elaborar un plan que permita pasar por diferentes modalidades asistenciales a medida que se acerca el momento del retiro”, indicó Toledo.
Además de proponer la bonificación de años para generar el causal jubilatorio, dado el alto nivel de desgaste de la tarea, la dirigencia del sector entiende que se debe enfocar al profesional en diversas áreas en función de su formación y de su edad. En ese sentido, Toledo explicó que sobre el final de la carrera sería conveniente “utilizar la experiencia de ese profesional, que seguramente sea muy bueno como consultante, docente, o investigador. Hay un momento en que tener toda esa experiencia acumulada disponible por cuatro horas diarias, es mejor que tener a la persona en turnos muy largos sobre una ambulancia”.
Con esa perspectiva, también está planteado analizar el tema de las compensaciones, para que no haya pérdida salarial como consecuencia de la reducción horaria. Además, se piensa en la creación de un hogar de retiro para los jubilados del sector que lo requieran, y de un panteón gremial, que en la actualidad no se tiene.
Más allá de los cambios pensados para los años finales, Toledo aclaró que la reducción horaria debe ser aplicada en todos los ámbitos. “Tenemos que encontrar la manera de eliminar las guardias de 24 horas, donde la persona sufre a nivel físico y emocional, y no rinde igual en las primeras 5 horas que en el final. No es aplicable que un médico trabaje un día entero, y después salga a hacer otra guardia porque necesita el salario”, apuntó.
Master en Gestión en Salud y ex presidente del SMU, el experto asegura que Uruguay tiene profesionales suficientes para cubrir todos los servicios, sin necesidad de hacer esos horarios. “Hay que dejar de estar encerrados en las instituciones y gestionar bien los recursos. Si pretendemos que cada institución tenga un especialista, los números no dan, pero la tecnología actual permite otra cosa. Hoy un radiólogo puede recibir en simultáneo las placas y tomografías hechas a 400 kilómetros de distancia. Se trata de hacer un trabajo en un formato diferente al actual. Hacia allí apuntamos”, manifestó.
Además de su nombre, la lista de la UGM está encabezada por los doctores Luciano Ramírez, Ignacio Amorín, Álvaro Medeiros, Patricia Arbes y Williams Saltre.
Fuente Imagen: www.smu.org.uy