Para el legislador “no es justo que haya una Televisión Pública de primera categoría y otra de tercera”, que funcione con recursos distribuidos de modo discriminatorio.
La iniciativa del senador Enciso propone extender al sistema de canales públicos del Interior el mismo régimen de financiamiento con publicidad estatal, del cual goza el actual sistema de Televisión Pública Nacional.
En 2005 el gobierno dispuso por ley (17.904) que “el 20% de las pautas publicitarias en televisión y radio que contraten por todo concepto y bajo cualquier modalidad los órganos del Poder Ejecutivo, entes autónomos y servicios descentralizados, (sean) contratadas con Canal 5 – Servicio de Televisión Nacional y con las radiodifusoras del Servicio Oficial de Difusión, Radiotelevisión y Espectáculos (SODRE)”, régimen de asistencia que se ha mantenido hasta el presente.
Ante el cambio del paradigma de las emisiones analógicas a las de formato digital en las emisiones de televisión, en 2013 el gobierno realizó un llamado a interesados para realizar emisiones de TV bajo esa nueva normativa técnica.
En la convocatoria, se propuso a 18 las Intendencias Departamentales del Interior la creación de canales televisivos de carácter regional, que conformaran un sistema de Televisión Pública del Interior emitido en formato digital.
Tras el llamado público, se presentaron doce Intendencias, las que fueron autorizadas en realizar emisiones de televisión pública en el marco de cuatro grandes proyectos televisivos regionales, en los cuáles se agrupan a más de un Departamento.
Luego de estudiar la plataforma de sustento del actual sistema de Televisión Pública, la iniciativa del senador Carlos Enciso propone una ampliación del financiamiento generado por las disposiciones de la Ley 17.904, al sistema de Televisión Pública del Interior.
Antecedentes
En agosto de 2013 el gobierno nacional realizó entre los gobiernos departamentales un llamado a interesados en emitir en cada departamento del Interior de Uruguay una señal de TV Pública Digital Terrestre (TVPDT), que quedaría operativa con el sistema digital luego del llamado “apagón analógico”, programado para noviembre de 2015.
La convocatoria tuvo la peculiaridad de que las autorizaciones serían para emisiones de televisión abierta y gratuita, y enmarcadas en canales departamentales que debían agruparse en cinco proyectos regionales.
Al final, de aquella convocatoria original aplicaron unas doce Intendencias, a las que se les asignaron canales departamentales que se agruparon en cuatro grandes regiones, cada una con dispar número de Departamentos.
En octubre de 2013 el gobierno nacional otorgó los canales del sistema de Televisión Pública del Interior.
Considerando que a los costos de inversión exigidos por el Ejecutivo en el pliego para montar los canales departamentales, deben sumarse costos operativos, y de generación y adquisición de contenidos como para atender emisiones de, al menos doce horas diarias, es necesario consolidar el proyecto de la Televisión Pública del Interior con una forma racional de financiamiento.
El llamado incluyó autorizaciones de canales para emitir una señal de Alta Definición (HD, por su sigla en inglés), dos de Definición Estándar (SD, por su sigla en inglés) y una de Un Segmento (One-seg, por su sigla en inglés), para televisión en teléfonos celulares.