En una jornada calurosa miles de niños y adultos vivieron la mágica llegada de los Reyes Magos -un año más- al Puerto de Montevideo.
Las luces robóticas, la proyección sobre los contenedores de la historia de los Reyes Magos, una marioneta de 8 mts. de altura llamada Clarita y la compañía y el relato de la conductora Emilia Díaz sirvieron de marco para una jornada de festejo y diversión, donde la expresión en los rostros de los niños fue el obsequio más valioso para las más de 150 personas que trabajaron en el proyecto.
La música dio paso al circo y el relato de Emilia Díaz sirvió de hilo conductor para que las 8500 personas que se encontraban sentadas aplaudieran, aclamaran y se asombraran con cada una de las sorpresas que el personal de Terminal Cuenca del Plata tenía programada para ellas.
El espectáculo transcurrió con la participación activa del público, donde todos y cada uno pudieron emocionarse, reír y celebrar las ocurrencias de esta “niña” tan particular; Clarita.
Los efectos robóticos de luces, la distribución de los contenedores, el ir y venir de los elevadores descubrieron un Cerro de Montevideo que se fue tornando color ocre para dar paso a la noche. Momentos después, la bahía de la capital fue testigo del arribo de Melchor, Gaspar y Baltasar para culminar con una noche colmada de aplausos y agradecimiento.