En la madruga de este sábado 21 de junio se tuvo el primer contacto con el satélite uruguayo ANTEL SAT, monitoreado desde la estación terrena de Manga de Antel; durante el día el aparato pasará dos veces por cielo uruguayo enviando información. La presidenta de Antel, Carolina Cosse, destacó el éxito de este proyecto de ingeniería nacional diseñado conjuntamente por Antel y la Facultad de Ingeniería de la Universidad de la República.
El satélite tendrá como objetivo medir desde el espacio índices relacionados con la agricultura y permitirá, entre otras cosas, obtener imágenes de Uruguay en tiempo real para el desarrollo de otros proyectos.
El dispositivo está equipado con dos cámaras de fotos, una que toma imágenes a color y otra infrarroja, que es capaz de medir la temperatura terrestre y del agua, además de la altura y la tipología de nubes existentes, según la información de la página web del ente y de la alta casa de estudios.
Con este satélite será posible localizar y caracterizar tormentas y ciclones tropicales, además de registrar el nivel de clorofila de las plantaciones para averiguar si están creciendo de forma saludable.
La presidenta de Antel, Carolina Cosse, confirmó este sábado a la Secretaría de Comunicación, que el satélite uruguayo envió las primeras informaciones en la madrugada de este sábado, sobre las tres de la mañana, y cerca de las 11.30 horas pasó por primera vez por cielo uruguayo siendo detectado por los técnicos de la Estación Terrena de Manga.
Cosse explicó que estas primeras señales son de telemetría. “Estas señales están moduladas en AM y nos pudimos dar cuenta por la característica de la señal que el satélite no está girando sobre sí mismo lo cual es muy bueno”.
La jerarca adelantó que esta noche el satélite volverá a pasar por cielo uruguayo y se tendrá comunicación de tipo telecomando, lo que permitirá probar los módulos desde la estación terrena de Manga.
“Es un éxito, todavía quedan cosas por hacer, faltan algunos días para que empecemos a recibir las primeras imágenes, y creo que tenemos que estar orgullosos como uruguayos que este equipo de Facultad de Ingeniería, de Antel, de la Escuela de Diseño de la Facultad de Arquitectura, hayan logrado algo que parecía un sueño imposible y sin embargo tenemos tecnología del Uruguay a 600 kilómetros de altura y viajando a una velocidad de 30 mil kilómetros por hora y funcionando”, subrayó la presidenta del ente.
Para Cosse, la concreción de este proyecto es importante para la ingeniería nacional y con ello se le está dando un gran mensaje desde estas instituciones y desde estos jóvenes, que crearon el satélite, a todos los jóvenes sobre el futuro y sobre la importancia de la educación pública.
“Viene todo muy bien y lo importante es lo que hemos construido, lo que queda en la tierra; las capacidades nuevas que hemos generado en Uruguay y el enorme desafío sobre cómo continuar generando capacidades en Uruguay. Seguramente Antel y la Facultad de Ingeniería vamos a seguir trabajando juntos y profundizando los lazos”, apuntó.
En este sentido, Cosse recordó que en 2011 Antel creó el área de innovación en la empresa y ese espacio es lo que permitió la interfase con Facultad de Ingeniería trabajando, por ejemplo, en el proyecto de robótica denominado Butiá.
“Lo interesante es que no solo se hacen los proyectos sino que además se realiza una tarea de divulgación donde los propios científicos han ido a escuelas y liceos a contar el proyecto, lo cual es importante porque no solo hay que hacer las cosas bien sino que además hay que contarle a los jóvenes qué es lo que se está haciendo para generar entusiasmo y descubrir vocaciones”, puntualizó la jerarca.
Antecedentes
El satélite uruguayo partió al espacio el pasado jueves desde la base Yasny, en Rusia, después de haber cumplido satisfactoriamente con las últimas pruebas antes de su puesta en órbita definitiva, entre ellas, su integración con el satélite italiano UniSat-6 en Roma y su acoplamiento en Rusia con el vehículo de lanzamiento Dnepr.
El proyecto ANTEL SAT surgió en 2007 y desde entonces contribuyó a la acumulación de conocimiento en esta materia a nivel nacional. Comprendió el desarrollo y perfeccionamiento de cada uno de los módulos y componentes del satélite, tanto de su estructura como de sus sistemas de energía, comunicaciones, controles, carga científica, lanzamiento y operación.
El satélite fue certificado por técnicos de la Universidad Politécnica de California (CalPoly, EE.UU.), quienes determinaron que el aparato se encontraba sin fallas y en condiciones de ser lanzado al espacio. Precisamente, los expertos estadounidenses elogiaron este año luego de las pruebas, la confección del satélite que pasó desde el primer momento los controles.
El artefacto pesa 2 kilogramos, mide 10 x 10 x 20 centímetros y fue construido por un equipo de 60 personas integrado por ingenieros de Antel, docentes y estudiantes de la Facultad de Ingeniería en base al prototipo CubeSat, un modelo que utilizan varias universidades y que también se usa en algunas aplicaciones comerciales. Antel aportó 695.000 dólares para financiar el desarrollo de Antelsat y su puesta en órbita.
Desde su partida Antelsat fue transportado en el interior de UniSat-6 y el pasado viernes fue expulsado y comenzó a trasladarse en una órbita baja a 600 km de la Tierra.
Desde este sábado, todas las etapas de su actividad pueden ser verificadas desde las estaciones terrestres de la Facultad de Ingeniería y de Antel en Manga cada vez que el satélite pase por encima de nuestro territorio, lo cual sucederá de dos a cinco veces por día. Desde esas estaciones Antelsat recibirá los comandos necesarios para ejecutar el registro y envío de fotografías, entre otras funciones.
Fuente Contenido e Imagen: Presidencia de la República. www.presidencia.gub.uy