Compartimos la columna del senador Pedro Bordaberry @PedroBordaberry candidato único a la Presidencia de la República por el Partido Colorado, titulada “Populismo versus Idoneidad”.
“Como si fuera una propuesta novedosa, el candidato a Presidente del oficialismo se refirió a como, en caso de ganar las elecciones, realizaría las designaciones ministeriales y en Entes y Organismos.
Afirmó que no las realizará por cuota política, como hasta ahora lo ha hecho su Partido en los últimos diez años, sino por idoneidad.
La confesión, por lo brutal, no debe pasar inadvertida.
Significa reconocer que él y su Partido no designaron a los más idóneos para ocupar cargos en Ministerios sino que repartieron por cuota política.
Ahora, promete que dejarán de hacerlo y pondrá a los mejores, o los que considera los mejores, en los cargos.
Lo dice, además, con aire solemne, como si fuera un gran avance cuando no es otra cosa que hacer lo correcto, lo que corresponde.
Esto lo decimos desde la tranquilidad de que lo que hoy anuncia el candidato oficialista fue, es y será nuestro proceder.
Cuando fui honrado con la titularidad de los Ministerios de Turismo, de Industria, Energía y Minería y de Deporte y Juventud procedimos a designar a los cargos de Directores mediante llamados públicos en los que los postulantes eran evaluados por terceros que seleccionaban una terna que finalmente era entrevistada.
Así, seleccionamos a los más idóneos para ocupar esos cargos, con independencia de cuotas políticas o cosas que se le parecieran.
El resultado fue espectacular.
En el actual período de gobierno cuando nos tocó proponer ciudadanos para ocupar cargos en Entes y Organismos Estatales primero evaluamos cuál era la tarea a cumplir, el perfil que el desempeño del cargo exigía, analizamos los posibles candidatos y finalmente los propusimos. Además hicimos públicos el análisis y el fundamento de la propuesta.
Es decir, seleccionamos a los que creíamos eran más idóneos para cumplir la función.
Nada de cuota política o pago de favores electorales con el dinero de los uruguayos.
Es una vieja práctica en nuestro país, acrecentada en los últimos años por el Frente Amplio, el de pagar favores electorales con cargos.
Así terminan, por cuota política y no por idoneidad, personas al Frente de entes, ministerios y direcciones.
Lo mismo sucede con los cargos de particular confianza.
Todo esto provoca daños al funcionamiento del Estado, impide el progreso del País y sobre todo es una señal de corruptela tolerada por todos.
Cuando uno arremete contra esta forma de proceder, algunos se acercan por lo bajo y le susurran “no lo digas muy fuerte porque nos quitará votos o apoyos“ o “espera hasta después de la elección para hacerlo“.
Así terminamos con 21 embajadores políticos o “de confianza“ que no son otra cosa que postergar a los profesionales de la diplomacia que se prepararon para el Servicio Exterior. Ello provoca cosas como que mientras la OCDE nos colocaba en una lista gris o nos calificaba de paraíso fiscal luego de dos años de trabajo en las comisiones, nosotros no estábamos enterados.
También nos lleva a esta política exterior errática y dependiente de la llamada telefónica presidencial y no del trabajo serio de los profesionales.
A su vez provocó que empresas monopólicas como Ancap pierdan 200 millones de dólares o que se designe al Gerente encargado del sector que le dio equivocadamente a Pluna 30 millones como Presidente del Ente.
Quizás el momento más bizarro de todo esto fue cuando se designó a la actual Ministra de Salud Pública. Tan era por cuota su designación que, cuando se hizo publica la misma, quien debía designarla, el Presidente de la República, reconoció que ¡no la conocía!
“La voy a conocer mañana“ expresó con brutal honestidad.
La misma brutal honestidad que ahora expresa el candidato de su Partido a sucederle, cuando dice que de aquí en más designará por idoneidad y no por cuota.
Nosotros nos comprometemos, como lo hicimos cuando estuvimos al frente de los Ministerios de Turismo, de Industria, Energía y Minería y de Deporte y Juventud, no sólo a designar por idoneidad.
Nos comprometemos a hacer públicos los procedimientos, los fundamentos, los planes y los resultados que queremos lograr.
Recuerdo que en uno de esas conferencias que organizan entidades gremiales, luego de exponer estos criterios, uno de los asistentes me preguntó si me consideraba un técnico o un político.
“Lo que Usted hace es propio de un técnico y no de un político“ adelantó.
Le contesté que esa diferencia entre político y técnico que planteaba era equivocada.
Lo contrario a técnico no es político.
Todos los que nos dedicamos a esta actividad somos políticos y ello no es una mala palabra.
Lo que sucede es que existen políticos que toman sus decisiones en base a fundamentos técnicos y otros que lo hacen en base a conveniencias personales o electorales.
Como también existen populistas y no populistas o quienes designan en cargos teniendo en cuanta la cuota política y quienes lo hacen en base a idoneidad.
También están los que designaron en el pasado por cuota política y ahora prometen que no lo harán”.
Fuente Imagen: www.elacontecer.com.uy
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