El diputado Pablo Abdala (Partido Nacional) el pasado miércoles 4 de setiembre solicitó información sobre la planta desulfurizadora recientemente inaugurada y reclamó que la inversión se traduzca en una reducción del precio del gasoil, cinco pesos por encima de la paridad de importación.
Abdala no comparte el aumento de combustibles que, según trascendió, está a estudio de Ancap. En caso de concretarse, convocará a las autoridades al Parlamento.
Compartimos la ponencia en la media hora previa de la Cámara de Representantes.
SEÑOR ABDALA.- Señor Presidente: vamos a dedicar estos minutos de la media hora previa a comentar y a reflexionar sobre un episodio que aconteció la semana pasada, el día 27 de agosto, en las instalaciones de la refinería de La Teja, que implicó como todo el país vio la celebración, en esa instancia, de dos actos conjuntos de naturaleza completamente distinta: por un lado, la entrega de las llaves de la ciudad de Montevideo a la señora Presidenta de la República Argentina y, por otro, la inauguración de una obra importante en las instalaciones de nuestra refinería, como es la de la planta de desulfuración del gasoil. Esta coincidencia de dos actos absolutamente distintos, como todos sabemos, generó una enorme polémica, mucho se discutió; y creo que es pertinente discutir sobre la oportunidad y la conveniencia de haber hecho coincidir los dos actos y, seguramente, sobre la oportunidad y conveniencia de haber entregado las llaves de la ciudad a la señora Presidenta de la República Argentina.
Este es un tema de debate en Uruguay; todos conocemos el comportamiento, el temperamento y la actitud que la señora Presidenta de la Argentina, no en nombre de su pueblo sino, en todo caso, de su Gobierno, ha tenido para con nuestro país en términos de menoscabar el interés nacional y de afectarlo severamente. Esa es una opinión que podrá compartirse o no, pero vemos que tiene muchos adeptos en Uruguay, sobre todo, a nivel popular. Ahora, lo que nos preocupa adicionalmente es la circunstancia de que un hecho relevante, como sin duda fue la inauguración de las unidades de hidrotratamiento de la refinería, que permitirán la eliminación del azufre del gasoil, quedara subsumido en la otra actividad. Es un hecho relevante, es una buena noticia que el país, a partir de esta obra que se llevó adelante y hacia el futuro, pueda refinar, distribuir y consumir combustibles sin niveles de azufre que generan contaminación.
Por otra parte, creo que el país debió, durante esos días y durante los subsiguientes, debatir y discutir sobre un tema diferente: no sobre la entrega de las llaves de la ciudad a la señora Presidenta de la Argentina, sino sobre todo con relación a las perspectivas que se abren al país si es que se le abren a partir de la obra que ese mismo día fue inaugurada. Ancap y el Gobierno nacional hasta este momento no han informado al Uruguay en qué contexto y en el marco de qué planificación estratégica se ha llevado adelante esta inversión. Me explico: más allá de lo importante de la inversión estamos hablando de US$ 360:000.000 , no queda claro si en algún momento esto se traducirá en un beneficio y en una mejora económica directa para los consumidores uruguayos. No está dicho; se ha preguntado, pero no se ha contestado si en algún momento esto se traducirá en la medida en que Ancap agrega valor a su producción en una rebaja del precio del gasoil que a partir de ahora será de mejor calidad y será refinado sin azufre, a la luz de la inauguración que se llevó a cabo. No se ha dicho con claridad si con el plan estratégico de Ancap en función de que ahora somos más competitivos porque tenemos gasoil sin azufre estaremos en condiciones de abrir espacios a la competencia, de abrir ventanas a la posible importación de gasoil refinado para que compita con el de buena calidad de Ancap y eso se traduzca, por lo tanto, en una mejora para nuestros consumidores. Uruguay hoy está pagando $ 5 más por litro de gasoil, según indica un estudio que no hemos hecho nosotros, sino la Ursea entidad reguladora que tiene competencia en esta materia que, comparando el costo de refinar el gasoil en Uruguay con el costo de la paridad de importación, establece con claridad una diferencia de $ 5 por litro.
Además, personalmente hemos preguntado a Ancap en forma reiterada acerca de los detalles vinculados con las características de la inversión. Ya en el año 2008 hicimos el primer pedido de informes cuando se abrieron las ofertas de esta licitación, con el afán de saber cuánto se había invertido, si era el precio justo. Se habla tenemos elementos de convicción suficientes para sostenerlo de que la inversión de US$ 360:000.000 no condice con las estimaciones iniciales elaboradas en la empresa, que precisamente proyectaron esta obra sobre la base de un costo que oscilaba entre los US$ 80:000.000 y los US$ 100:000.000. No está claro cómo se va a financiar. Sí está claro que es una inversión pública, pero no cuál será el mecanismo, el flujo de caja, la tasa de retorno ni la forma de financiación de esta inversión. Por lo tanto, si es que estamos como el propio Gobierno ha proclamado frente a la obra ambiental más importante poco menos, poco más de la historia del país, queremos conocer cuáles son las verdaderas características de lo que se inauguró el pasado 27 de agosto, cuál es el verdadero esfuerzo que los uruguayos habremos de realizar para repagarla, por cuánto tiempo, y sobre todo cuáles son los beneficios que al respecto podemos esperar.
Por esta razón, señor Presidente, y reiterando el pedido de información a quien la debe proporcionar, las autoridades del Gobierno central y de la empresa Ancap, nos permitimos trasladar esta inquietud a la Cámara de Diputados en ocasión de la media hora previa.
Solicitamos que la versión taquigráfica de nuestras palabras sea enviada a la Intendencia de Montevideo por lo que le compete, y al Ministerio de Industria, Energía y Minería y al Directorio de Ancap lo vinculado con la energía y los combustibles.