En el II Congreso de Mercoparts que se desarrolla en el hotel Conrad, el ministro Kreimerman destacó a la industria automotriz, y en particular el sector de las autopartes, como uno de los más pujantes de la región. Dijo que el Mercosur seguirá creciendo si apuesta a fomentar esta cadena de valor y sustituir competitivamente los insumos importados.
El ministro de Industria, Energía y Minería, Roberto Kreimerman, participó hoy jueves 7 de marzo de la apertura del II Congreso de Mercoparts “Desarrollo e inserción de la cadena automotriz regional en un panorama de crisis internacional”, que se desarrolla en el hotel Conrad de Punta del Este.
En la actividad expusieron también el ministro (I) de Economía y Finanzas, Luis Porto, y el director nacional de Industrias, Sebastián Torres, entre otras autoridades.
En su alocución, Kreimerman agradeció al sector autopartista por aportar al desarrollo de los países del Mercosur y comprometió el apoyo del Gobierno hacia la industria y el desarrollo del sector automotor y de autopartes en particular.
De este, afirmó que se encuentra en un momento de “oportunidades, resultados y desafíos”, y lo calificó como “uno de los sectores más pujantes del mundo, que está invirtiendo mucho en América Latina, y específicamente en Uruguay”.
Recordó que la producción de vehículos, y por ende de autopartes, se ha incrementado sin cesar, y en este marco el Mercosur se ubica como la quinta región productora del mundo, con más de 4 millones de vehículos, de un total de 81 millones (2012).
Aun así, señaló que la composición de esta cadena de valor aún está retrasada y consideró que todavía existe potencial para que el comercio intraindustrial e intrarregional aumente notoriamente. No obstante, destacó que la inserción internacional de nuestros países se está realizando “en un sentido inclusivo para nuestras sociedades”.
El secretario de Estado hizo hincapié en que este sector de perspectivas muy positivas cuenta con avances en la legislación de la seguridad. Al mismo tiempo, dijo que, a futuro, el foco estará en la eficiencia energética y la mejora continua, que ya es base de esta industria.
“América Latina tiene la posibilidad de seguir sustituyendo competitivamente insumos para nuestros automóviles y seguir creciendo”, aseveró el jerarca. Esto solo es posible porque América Latina y el Mercosur “están llevando adelante (…) políticas que tratan de desarrollar la industria automotriz”, añadió. Kreimerman deseó que este crecimiento sea “complementario”: es decir, que “permita el desarrollo industrial de cada país y a su vez complemente el desarrollo industrial de cada región”.
El ministro definió a esta cadena de valor como “pionera” y “exigente”, aunque poseedora de “una oportunidad muy grande”: la de que los países del Mercosur formen sus propias cadenas de valor, en lugar de recibir los productos del exterior.
Recordó que se está poniendo en marcha un proyecto largamente trabajado, el Fondo de Convergencia Estructural del Mercosur (Focem), que dará lugar “a una intensificación y complementación de la competitividad del sector”.
En nuestro país destacó los “consejos sectoriales, la capacitación y la continuidad del apoyo gubernamental”. Añadió que la competitividad en su tema que preocupa al Gobierno, que está haciendo esfuerzos para favorecerla.
Kreimerman dijo que, en esta cadena en particular, el Gobierno y los empresarios deben trabajar juntos, para el desarrollo del sector y “el bien de nuestra sociedad”.
Adensar la cadena productiva
Por su parte, el director nacional de Industrias, Sebastián Torres, repasó algunos aspectos de la actualidad del sector automotor, desde la importancia del contexto global, hasta la realidad nacional, caracterizada por años de crecimiento sostenido.
Sostuvo que es necesario poner el foco en las políticas sectoriales. Recordó que existen herramientas, como los consejos productivos (integrados por el Gobierno, los empresarios y trabajadores), las empresas púbicas como motor de desarrollo, el financiamiento para el desarrollo productivo y la inserción internacional.
Actualmente, indicó, se está desarrollando un Clúster automotriz autopartista, que explorará posibilidades de complementación al nivel del mercado nacional. La meta es “adensar” esta cadena productiva.
Asimismo, el plan sectorial para esta industria busca incrementar los flujos de comercio y diseñar una estrategia de política comercial convergente, entre otros puntos.
Torres también destacó el acuerdo comercial con Brasil y aseveró que la integración con los países de la región y la negociación colectiva para defender nuestros intereses son la clave en nuestro mundo multilateral.
Reto para el sector
En tanto, la presidenta de la Cámara de Fabricantes de Componentes de Automotores, Cecilia Casulo, dijo que el congreso busca afianzar los lazos para efectivizar objetivos comunes que “se construyen día a día”. Agregó que es un “reto” construir un desarrollo dinámico y duradero en el Mercosur.
El embajador Gonzalo Rodríguez Gigena, presidente del congreso, por su parte, indicó que el sector automotor constituye uno de los más importantes de la agenda del Mercosur, y afirmó que la integración productiva es fundamental y ha tenido un “despliegue fenomenal” en el último período. Consideró también que el proceso de integración productiva puede profundizarse, y existen varios grupos de trabajo en pos de ello.
Destacó, además, los logros en el sector de los autopartes, que, en su opinión, constituye una de las respuestas a la crisis internacional.