EL POPULAR dialogó con Daniel Marsiglia, miembro del Comité Ejecutivo del PCU, quién analizó el significado del 41 aniversario del FA, los desafíos políticos de 2012 y la posición de los comunistas hacia las internas del 27 de mayo.
-¿Qué significado político tiene el 41 aniversario del FA?
– Si uno lo comparara con la edad biológica de un ser humano estamos en la mejor edad. ¿Por qué? Porque tenés toda una experiencia vivida y acumulada.
Hay que decir que ha sido una experiencia dura, como la que le tocó vivir a miles de compañeros y compañeras, eso es también la experiencia del Frente Amplio. Si uno piensa que había compañeros que caían con 20 años y lo proyecta a los 41 años del Frente Amplio, puede decir, que es una dura y rica experiencia de lucha. Cómo toda esa experiencia de la cárcel, la tortura, la persecución, endurece pero a la vez fortalece a ese ser humano en sus convicciones, en su vida. En la vida política del Frente Amplio eso no puede estar ausente porque lo que sufrieron sus militantes también lo sufrió la fuerza política como tal. El Frente Amplio es la construcción colectiva de cientos de miles de mujeres y hombres que fueron capaces de construir esta formidable herramienta política.
El golpe de Estado, la represión, no fue solo a los individuos, fue a los colectivos que estaban peleando por un proyecto de país distinto, por una sociedad distinta. Hablar de los 41 años del FA es, entonces, hablar de una historia de lucha, de epopeyas democráticas, de compromiso, de unidad. Por supuesto también es hablar de la recuperación democrática, de la conquista de la Intendenciade Montevideo, de las intendencias del interior del país y de los dos gobiernos nacionales. Es pensarnos en estos 41 años en la perspectiva y la estrategia de seguir construyendo los caminos de emancipación del pueblo uruguayo. Tenemos la responsabilidad histórica de seguir construyendo más y mejor Frente Amplio para seguir transformando una sociedad, que hemos cambiado en estos 7 años de gobierno, pero que todavía falta mucho para cambiar, en el objetivo que es para nosotros una sociedad sin explotados ni explotadores.
-¿Cuáles son los principales objetivos políticos del FA en este año?
-Este año es un año bisagra. No podemos dejar de ver que el Frente Amplio es hoy la fuerza política de gobierno.
Tenemos que tratar de hacer un análisis global, desde el gobierno, desde la fuerza política y desde la sociedad.
Mirado desde el gobierno 2012 es un año bisagra porque tenemos que tratar de apurar el caballo, al decir de Arismendi. En todas aquellas cosas en las que aún nos falta, 2012 tiene que ser al año en que se aborden, el año en que vayamos a profundizar en el programa de gobierno. En el plano de la fuerza política, seguir construyendo esa herramienta formidable de coalición y movimiento. Tenemos una instancia muy importante el 27 de mayo, cuando vamos a elegir las autoridades del Frente Amplio: el Plenario Nacional, los Plenarios Departamentales; pero también, como cosa novedosa y transitoria, el presidente del Frente Amplio y de los Plenarios del Interior del país. Mirado desde la sociedad como somos capaces de seguir anclando al Frente Amplio en el seno de nuestro pueblo. Fortalecer y profundizar esa relación que no podemos perder nunca, de escuchar los reclamos de nuestro pueblo y darles cauce político. Además seguir construyendo con esa otra herramienta fundamental de nuestro pueblo que es el movimiento sindical. Esas dos herramientas, junto con el resto del movimiento popular, pero el FA y el movimiento sindical en particular, fueron las que posibilitaron derrotar la dictadura y abrir cauce a los cambios y llegar al gobierno nacional.
Esas son las claves para seguir fortaleciendo y construyendo en el 2012 con el 27 de mayo como instancia fundamental.
-¿Cuál es la posición del PCU y sus propuestas hacia las internas del FA del 27 de mayo?
-Antes de profundizar en la respuesta un señalamiento imprescindible.
Este año se cumplen 40 años del asesinato de los 8 camaradas dela Seccional20. Para nosotros los comunistas, eso es parte del proceso que culminará el 27 de mayo. Vamos a hacer una gran actividad, porque el FA, la lucha de nuestro pueblo, tiene como un elemento fundamental, construir la memoria, la verdad y la justicia. ¿Qué nos dicen esos 8 obreros comunistas de cómo tenemos que encarar el 27 de mayo? Esos 8 obreros comunistas fueron asesinados por luchar por la unidad del movimiento sindical, por la unidad y la construcción del Frente Amplio, por la transformación de la sociedad.
Entonces lo primero que nos reclama la historia, el presente y el futuro, es como somos capaces de defender la unidad del FA. Es compleja, tiene contradicciones, pero es una conquista central para nuestro pueblo, para la posibilidad de los cambios. En ese sentido nos hemos trazado algunos objetivos y los hemos conversado en una ronda de conversaciones políticas con todos los sectores del FA, con todos. El objetivo primario es, discutiendo todo lo que haya que discutir, peleando, con diferencias, pero haciendo un gran esfuerzo político, encontrar una candidatura de consenso para la presidencia del FA. Quedaron muchas heridas abiertas por cómo se procesó la elección del candidato a presidente dela República, más los intendentes, la implementación de múltiples candidaturas.
La verdad es que no hay ninguna evidencia empírica de que esas situaciones nos posibilitaron un salto cualitativo en la organización o en el crecimiento del FA, ninguna. Entonces nosotros trataremos de construir una candidatura de consenso. Lo otro que queremos y estamos planteando es que haya una campaña institucional, una campaña que sea del Frente Amplio, con la participación de compañeros de todos los sectores, para convocar a los frenteamplistas a votar por las diferentes listas. Si no hay candidato de consenso, habrá un escenario de dos o tres candidatos pero igualmente la campaña tiene que ser frenteamplista. No queremos comandos electorales y polarización.
¿Por qué? Porque el objetivo político central tiene que ser lograr una participación del nivel de la lograda en las elecciones internas del 2006.
Estas últimas elecciones internas se realizaron al año de gobierno del compañero Tabaré Vázquez, con las cifras de apoyo de Tabaré allá arriba, con la gestión de gobierno con un gran apoyo y con el FA también con gran respaldo.
La situación de hoy no es esa lamentablemente, hoy tenemos una fuerza política, perezosa, diezmada, de respuesta lenta.
Por problemas propios y también reflejo de algunos problemas en el gobierno. Incluso también, como consecuencia de cierta tendencia a la autoflagelación; a veces hay una crítica permanente hacia el FA, hacia la coalición, hacia el movimiento, que termina haciendo daño, la gente no está para ir a un Comité de Base y que le peguen todos los días, cuando está haciendo un esfuerzo enorme. Es cierto que estamos en un escenario más complejo que el de 2006 pero el piso es ese y ese es el objetivo. En el 2006 hubo 220 mil votos; igualar o superar esos guarismos es un gran objetivo político. Porque aquí la batalla principal es con la derecha y tenemos la necesidad de reafirmar el Frente Amplio como herramienta política. Hay que fortalecer la gestión de gobierno y la acción política ahora y también en la perspectiva del 2014. Acá no vale la alternancia.
La alternancia es entregarle el gobierno a Bordaberry y a Lacalle. Nosotros queremos seguir construyendo Frente Amplio y poder popular.
Entonces esta campaña debe ser contra la derecha que nos está dando una dura batalla ideológica, que nosotros como PCU, no queremos hablar en nombre de más nadie, a veces sentimos que la perdemos. Me explico, la perdemos cuando nos quieren correr con el poncho con la baja de la imputabilidad, con la enseñanza. Tenemos que salir a dar la batalla contra la derecha. Por eso concebimos el 27 de mayo en ese marco y necesitamos que voten masivamente los frenteamplistas e igualar o superar los 220 mil que votaron en el 2006. Es un objetivo enorme, es cierto, pero lo tenemos que vivir, disfrutar, trabajar y organizar como colectivo Frente Amplio.
Fuente: El Popular.