Recibimos y Publicamos.
A Quien Corresponda
Por la pte. solicito a Ud. dar espacio en su medio de difusión a la carta abierta al Sr. Presidente de la República que va a continuación. Agradeciendo desde ya su gentileza, saludo a Ud. muy atte.
Prof. Juan de Marsilio
C.I. 1.864.466 – 4
Cayetano Silva 4169 E, CP 12900, Montevideo
Montevideo, 3 de enero de 2012
Sr. Presidente de la República Oriental del Uruguay
Don José Mujica
Respetado Señor:
Esta breve carta tratará de un tema en el que Ud. viene insistiendo desde la campaña electoral que – entre otros votos con el mío – lo puso en el cargo que hoy ocupa. Me refiero a la educación pública.
Hallo loables sus intenciones de llegar a un gran acuerdo nacional sobre el tema. Sin embargo, considero errónea y potencialmente perjudicial la preeminencia y casi exclusividad que les confiere Ud. en el asunto a los partidos políticos. No les niego un ápice de su representatividad, primero porque creo en la democracia representativa y el pluripartidismo y, en segundo lugar, porque yo mismo tengo pertenencia partidaria. Ahora bien, creo que para que un acuerdo sea realmente nacional, debería también reflejar el consenso – o al menos tratar de lograrlo – de otras organizaciones que, en la sociedad civil, ejercen también la representación de distintos sectores de la ciudadanía. Esto incluye a los sindicatos de la educación – me honro en ser afiliado a uno de ellos, la FENAPES – pero dentro de un amplísimo conjunto social, abigarrado, rico y polifónico. Por eso es que, en atrasado cumplimiento de una Ley de Educación que combatí pero está vigente, creo que sería buena cosa convocar el 2º Congreso Nacional de educación, en las mismas condiciones de convocatoria y funcionamiento que el primero. Y si fuera posible, a diferencia del Congreso anterior, prestarle algo más de oído a lo que se resuelva. Pero el gobernante es Ud., no yo, y sabrá qué hace.
Sean cuales fueren las decisiones que Ud. tome sobre este asunto me atrevo a cerrar esta carta con una cita de prensa (del diario británico “The Independent”, citado a su vez por “Cuba Debate”), porque me parece técnicamente orientadora sobre lo que habría que hacer, aunque no sea posible lograrlo de hoy para mañana:
“Las estadísticas son suficientes por si solas para volver verde de envidia al padre de un escolar promedio británico: existe un estricto máximo de 25 niños por aula de primaria, muchas de las cuales tienen solamente 20. Los estudiantes de secundaria se dirigen a clases de sólo 15 alumnos – menos de la mitad que la norma británica”
Sin otro particular, y expresando mi deseo y compromiso en que termine Ud. su Presidencia con los mayores logros, lo saludo con profundo respeto.
Prof. Juan de Marsilio
C.I. 1.864. 466 – 4