¿Qué pasaría en otros países si echan de una sola “medida oficial” a medio millón de empleados estatales como en Cuba? Suerte para el régimen que en la isla hacer huelga es asunto prohibido y los “sindicatos de trabajadores” son siempre “inevitable y entusiastamente oficialistas” y participan decididamente en el proceso de despido masivo de sus compañeros. Algo impensable, claro, en sociedades donde los trabajadores tienen la absoluta libertad de oponerse a medidas de tal tipo, ejerciendo con la misma libertad la defensa de sus intereses y puestos de trabajo. En fin, sumado esto a que desde el gobierno cubano también decidieron ir eliminando gradualmente las cartillas de racionamiento que desde el 62’ le daban a la población (señalan que ya no es correcto “subvencionar desde el estado” y que desde ahora la población deberá ir consiguiendo a “precio de mercado” los productos que les van eliminando de la cartilla. Ver: http://diariolibre.com/noticias_det.php?id=274126&l=1 ), parece claro que el definitivo viraje de la isla hacia un estado y una economía capitalista, de fuerte acento en lo privado y disminución de lo público, está llevándose adelante con drásticas medidas. Eso sí, macroeconomía de mercado pero férreo mantenimiento de la ausencia de libertades políticas e individuales. Parece ser un viraje en algún punto relacionado con la “exitosa receta” del modelo desarrollado por el comunismo capitalista chino: libertad de mercado y fuerte control político. ¿Estaremos asistiendo al comienzo del nacimiento del “viraje chino” del régimen cubano? De momento, lo inminente es que el proceso de reajuste económico de la isla dejará sin empleo a medio millón de cubanos, achicando drásticamente el Estado y “recomendando” la iniciativa privada de los trabajadores, quienes tampoco gozarán más de los productos básicos que antes les suministraban a módicos precios estatales.
Y a aquellos que con respeto y argumentos les interese debatir sobre el tema, los invito a dejar sus comentarios en mi blog www.romeroweb.com
Pablo Romero.