El argentino Ezequiel «Pocho» Lavezzi y el uruguayo Edinson Cavani llevaron hoy domingo 23 de enero al Nápoles al segundo puesto en la liga italiana al conseguir los dos goles en la victoria ante el Bari (0-2).
El equipo napolitano está cada vez más convencido de que el Scudetto, el título de Liga, está detrás de la puerta.
La jornada tuvo la parte negativa para la representación latinoamericana en el autogol de argentino Maximiliano Pellegrino (m.46+) que abría el triunfo casero del líder Milan sobre el Cesena (2-0), tras una primera mitad en la que los visitantes merecieron incluso ir por delante en el marcador.
Pero el argentino Ezequiel Schelotto (m.17) vio como el meta milanista Christian Abbiati le sacó un duro disparo a bocajarro.
En esta vigésima primera jornada se marcaron 20 goles, de los que cuatro fueron obra del argentino Lavezzi, de los uruguayos Cavani y Gastón Ramírez y del colombiano Cristián Zapata.
Lavezzi y Cavani demostraron compenetración y el tanto del uruguayo llegó tras un pase del argentino, que logró su gol con un bonito taconazo.
«La cosa que más cuenta para nosotros es la victoria y que el equipo continúe creciendo. Cada día que pasa somos más equipo», aseguró Lavezzi al final del encuentro.
Si el dúo argentino-uruguayo permitió al Nápoles ganar por 0-2 al colista Bari, Zapata abrió la tanda de goles que permitió a su equipo, el Udinese, vencer por 3-0 al Inter del brasileño Leonardo, que se presentó en la ciudad véneta después de cuatro jornadas sin perder y dispuesto a prolongar su buena racha.
Stankovic marcó el primer tanto para el Inter, pero el colombiano empató cinco minutos después y desde ese momento el partido cambió de rumbo y llegaron los goles de Di Natale -máximo anotador de la liga italiana- y Domizzi que sentenciaron el encuentro.
A pesar del descalabro, Leonardo no se desesperó y afirmó que el Inter sigue en la lucha por el Scudetto y que lo importante «es estar».
Igual pasó en el encuentro Bolonia-Lazio, que comenzó con un tanto del lazial Floccari que parecía abrir las puertas del triunfo al club romano, pero Gastón Ramírez, con un gran gol en el minuto 37, empató y abrió el camino para que Di Vaio encajara otros dos tantos, acabando con las pretensiones de los capitalinos.
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