La directora general de la OPS, Mirta Roses, reconoció que Uruguay dio una respuesta efectiva al tema de la Gripe A H1N1, dado que históricamente tiene experiencia en el manejo de la Influenza y es de los mejores países del continente en materia de vigilancia epidemiológica. Considera que esta región garantiza la correcta administración de la vacuna, pero aún resta definir qué países y poblaciones tienen prioridad.
Uruguay brindó una respuesta muy efectiva en lo que respecta a la Influenza A H1N1, señaló la Directora de la Organización Panamericana de la Salud. Esto obedece a que, por un lado, es un país que tiene mucha experiencia en el manejo de la Influenza históricamente y por razones geográficas. Por otro lado, Mirta Roses resaltó que el país es muy bueno en vigilancia epidemiológica, de los mejores del continente.
La Jerarca reconoció que en nuestro país no se perturbó en demasía la vida de las personas, y que se supo trabajar con los medios y con la población para generar confianza en las medidas instrumentadas.
Roses aseguró que ya se está superando esta etapa en la parte sur del continente. Ahora se preparan para una reaparición en el norte y se debe aguardar cómo se comportará el virus en esta segunda ronda, dijo.
“El virus nació y se quedará en la familia. No lo vamos a poder sacar, como a ninguno de los gérmenes que han ido surgiendo en el mundo”, aseguró. Lo que se hará es vigilar cómo actuará en la próxima temporada invernal del hemisferio norte”.
Recordó que los virus tienen tendencia a mutar, a veces para hacerse más suaves, pero a veces para adquirir características más agresivas o cambiar de grupo poblacional. Es necesario, dijo, mantener el monitoreo y la transparencia en la información que lograron tener todos los gobiernos de las Américas.
En cuanto a la vacuna contra la Gripe A H1 N1, Roses explicó que existieron muchos problemas para “domar” al virus, y que se reproduzca como todos esperaban para ingresar al proceso industrial.
La industria ha ido postergando las fechas –inicialmente hablaban de setiembre- pero se aguarda que para noviembre tengan afinado el proceso industrial.
De todas maneras, la OPS prevé que unos diez productores mundiales podrían entrar a pleno a la producción, alcanzándose las 90 millones de dosis semanales. Esto implica que se debe hacer un ejercicio muy importante de consenso entre las autoridades de todos los países, para escoger qué naciones y qué parte de la población accederá a la vacuna, teniendo en cuenta que no estará disponible para todos los países, ni para todas las personas.