Desde Policía Caminera se afirmó que en la presente temporada estival se experimentó un importante flujo vehicular en las rutas nacionales, fundamentalmente en la faja esteña del país. En cuanto a siniestralidad, si bien se desconocen las cifras totales, ya que la temporada está en curso y resulta prematuro realizar evaluaciones, se constató que la imprudencia y la mala maniobra son factores clave en esta problemática.
En lo que va del mes de enero, los conteos dominicales en los peajes del Arroyo Pando y del Solís, arrojan una importante cifra de vehículos que retornan a la capital y litoral del país. Asimismo, el Jefe de Relaciones Públicas de Policía Caminera, Sergio Olivera indicó que los días viernes y sábados hasta el mediodía, se ha constatado un flujo de entre 2.000 y 2.700 automóviles por hora por la Ruta Interbalnearia.
En cuanto a cifras de siniestralidad, Olivera explicó que si se comparan las correspondientes a enero 2009 con las del mismo mes pero de 2008, se llega a un promedio similar. En lo que a lesionados en las rutas se refiere, señaló que sí se marca una diferencia, ya que el pasado año, se registraron 216 contra 241 del 2009. Los guarismos también muestran que a igual período de año transcurrido, los fallecidos en 2008 fueron 28, en tanto que en el presente año, se registraron 23 decesos. Olivera señaló que si bien los números indican una baja toma de conciencia, el porcentaje de intervención en siniestros de conductores alcoholizados en 2008, fue en el entorno del 11%, en tanto que en años anteriores oscilaba entre los 13 y 15%. Los números del presente año, aún no se conocen.
Resaltó que en el tema de accidentalidad vial, no se pueden elaborar hipótesis a futuro, ni pronosticar el crecimiento o descenso de las cifras, ya que no existen parámetros, dijo.
En cuanto a la lectura sobre los hechos concretos de impericia o imprudencia, Policía Caminera estima que la imprudencia alcanza cifras de 26% en tanto que las malas maniobras llegan al 19%. Olivera destacó que los datos fidedignos están a cargo de Policía Técnica y de la Justicia cuando llevan a cabo las pericias y recaban los testimonios de todos los intervinientes, tanto protagonistas como testigos. Asimismo afirmó que la imprudencia representa el principal factor de accidentalidad, en tanto que la impericia ocuparía el segundo lugar en riesgo.
El Jefe de Relaciones Públicas de Policía Caminera, recordó que todos los conductores deben preservar el estado del vehículo en general y de las luces, frenos y cubiertas en particular, incluidos los birrodados con motor.
Explicó que en los casos en que Policía Caminera constata un conductor cuyos niveles de alcohol en sangre sobrepasan el límite permitido (0,5 gramos de alcohol por litro de sangre) inmediatamente se lo inhabilita para conducir y se elevan los antecedentes a la comuna correspondiente, ya que es el organismo que dicta la resolución de prohibición de conducir por un determinado período de tiempo. Aclaró que el vehículo nunca queda detenido, sino retenido hasta que ese conductor u otro habilitado lo pueda retirar.
Concretamente en lo referente a la temporada 2009, Olivera afirmó que el próximo fin de semana, en el que culmina enero y comienza el mes de febrero, se dará el último recambio importante de veraneantes. Agregó que históricamente, febrero no representa tantos traslados entre diferentes puntos del país.
A modo de ilustración, el Jerarca señaló que para un «operativo retorno» en el Área Metropolitana (Montevideo, Canelones y San José), Policía Caminera destina entre 30 y 35 móviles y unos 65 efectivos policiales. Añadió que a esto, se debe unir la operativa del Departamento de Maldonado, donde se comparten tareas con la comuna fernandina. Afirmó que Caminera tiene una muy buena presencia, fundamentalmente en la franja comprendida entre Colonia y las costas oceánicas del Departamento de Rocha.