En nuestro país se anunció en las últimas horas la incorporación de los tratamientos de fertilización in vitro e inseminación artificial al sistema sanitario público y estatal. De esta forma, los ciudadanos que padecen trastornos reproductivos podrán acceder desde este año, de forma gratuita, a esos procedimientos.
Con esta medida, los usuarios tendrán acceso tanto a técnicas de baja complejidad (estimulación de la ovulación e inseminaciones intrauterinas), como a las de alta complejidad, que incluyen fertilización in vitro, congelamiento y transferencia de embriones, transferencia uterina y tubárica de gametos y embriones.
En Uruguay se estima que entre un 15 y un 18% de la población tiene trastornos reproductivos. Sin embargo, las parejas que no pueden concebir un hijo de forma natural deben recurrir a clínicas privadas para realizar un tratamiento cuyo costo aproximadamente los 5.000 dólares.
La iniciativa del Estado implica romper con una barrera de indiferencias que se arrastran desde hace muchos años y otorga fundamental importancia a satisfacer la necesidades de la maternidad y paternidad, dijo el sub director de la Administración de Servicios de Salud del Estado, Daniel Gestido.
Anunció también la incorporación de técnicas de esterilización femenina por vía endoscópica, lo que llevaría a desechar la necesidad de cirugía y anestesia y con un período de recuperación sensiblemente menor al de la intervención quirúrgica.