Nos acercamos al final de otro año de trabajo intenso y provechoso, nos encontramos a las puertas de un tiempo desafiante, provocativo y movilizador. O sea que estamos viviendo, tal y como habíamos comprometido, un proceso de cambios y de compromiso democrático y ciudadano sin estridencias, pero firme y radical en sus convicciones.
Se trata de un esfuerzo plural y colectivo, a veces chambón y en ocasiones contradictorio; es un afán complejo y problematizador, cuyas raíces se hunden en antiguas tradiciones políticas y su espíritu anida en el nerviosismo de una redacción que está de cierre, o en la locura de una sala de producción de la radio o la televisión.
A veces nos cuesta valorar justamente los avances y los hechos que producimos. En algunos momentos nos dejamos llevar por visiones parciales, por las voces de intereses sectoriales o por ideologías que son legítimas, pero que no dan cuenta del rumbo general ni de los hechos que están ahí y son una irrefutable prueba de verdad.
Los testimonios que siguen no fueron producidos ni realizados por la SCI de la Presidencia, son entrevistas de medios profesionales y sus periodistas en Uruguay y en Argentina. Es el diálogo de profesionales reconocidos y destacados con la Relatora de OEA para la Libertad de Expresión, la Dra. Catalina Botero, quien habla desde su lugar de jurista y de responsable imparcial de un organismo internacional, con la mirada puesta en la situación de la comunicación en las Américas.
Sus comentarios valen porque la Relatora no está involucrada en nuestras peripecias cotidianas. Tampoco guarda compromisos con autoridades ni con sectores en particular. Es la mirada de una funcionaria muy calificada del sistema interamericano, que actúa por mandato de la organización y trabaja en el área de la comunicación en una perspectiva de derechos humanos.
Pasen y lean:
Relatora para la Libertad de Expresión afirma que Uruguay es «pionero» y «modelo» en la región
Portal InfoyCom, 25 de noviembre de 2008 – Fernando Gelves
La Relatora Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la Organización de Estados Americanos (OEA), Dra. Catalina Botero, durante una visita académica -no oficial- por el país expresó que la Ley de Radiodifusión Comunitaria, aprobada en diciembre por el Parlamento uruguayo, es «pionera en América Latina, un ejemplo en términos de inclusión e igualdad» y que el resto de la región debería tomarla como modelo al momento de establecer normativas que promuevan la libertad de expresión.
En entrevistas concedidas a los diarios Página 12 y Clarín de Argentina, destacó también la importancia de varias medidas adoptadas por nuestro país en la materia. Según sus palabras, Uruguay es «un modelo» para la región pues desde el último año y medio viene llevando adelante «la agenda más completa de libertad de expresión», ya que «dictaron una ley de acceso a la información y otra sobre radiodifusión comunitaria; están elaborando una ley sobre distribución de publicidad oficial, otra sobre radiodifusión general y una más para quitar los delitos de injurias y calumnias vinculadas al periodismo» [1].
Botero participó en el Foro sobre Pluralismo y Diversidad en la Radiodifusión, organizado por el Centro de Competencias en Comunicación (C3) de la Fundación Friedrich Ebert y FESUR, expresó que la libertad de expresión debe pasar a ser considerada como un derecho humano fundamental.
Este Foro contó -además- con la participación del ministro de Industria, Energía y Minería, Ing. Daniel Martínez; Omar Rincón, del C3; la Dra. Alicia Fernández, directora de la URSEC; y Damian Loreti, consultor de PNUD y OPP.
También fue invitada por el Grupo Medios y Sociedad (GMS), el Programa de Legislaciones y Derecho a la Comunicación de la Asociación Mundial de Radios Comunitarias (AMARC) y la Asociación de la Prensa Uruguaya (APU), con el objetivo de realizar otras actividades durante su estadía. Estas incluyeron diversas reuniones de trabajo con representantes de la sociedad civil, así como un taller sobre el Sistema Interamericano de Derechos Humanos.
[1] Refiere al proyecto modificativo de la actual Ley de Prensa, al que hiciéramos mención semanas atrás. Para obtener más información respecto al proyecto de ley modificativo de la Ley de Prensa, presentado por el Poder Ejecutivo al Parlamento, ver nuestro Portal de Información y Comunicación
Entrevista a Catalina Botero.
Radio Uruguay, 25 de noviembre de 2008 – 17 nov. 2008.
Entrevista en Radio Uruguay a la Relatora de Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Dra. Catalina Botero en relación con su visita a Uruguay los días 17 y 18 de noviembre donde participó del Foro sobre Pluralismo y Diversidad en la Radiodifusión
Radio Uruguay – Desde aquí desde Radio Uruguay le estamos dando la bienvenida a una mujer que con la que contactamos telefónicamente cuando acababa de asumir, ahora llega a nuestro país para trabajar en un Foro sobre Pluralismo y Diversidad en la Radiodifusión.
Es un gusto darle la bienvenida, tenemos unos pocos minutos para hacerlo pero Dra. Catalina Botero muy buenos días.
Catalina Botero – Buenos días María Ines un placer estar en radio Uruguay otra vez.
RU – Libertad de Expresión de la OEA, Relatora de libertad de Expresión de la OEA, ese es tu puesto verdad? Te hicimos un contacto cuando asumías, ahora ya tienes más cartas sobre la mesa.
CB – Si, me hicieron un contacto antes de asumir, una entrevista muy larga y muy bonita que yo les agradezco mucho.
RU – Muchas gracias. Queríamos retomar contacto porque ahora si estas en nuestro territorio.
CB – Si. Ahora si estoy en su territorio.
RU – Estas en casa?
CB – Estoy en casa. Sí, me siento en casa.
RU – Has venido para participar en este Foro, sobre Pluralismo y Diversidad en la Radiodifusión, con distintas ponencias, entre ellas estará la del Ing. Daniel Martínez, Ministro de Industria, Energía y Minería; la directora de la Unidad Reguladora de Servicios de Comunicación, URSEC, la Ing. Alicia Fernández; el consultor del proyecto del PNUD y de la OPP Dr. Damian Loreti; y el Sr. Omar Rincón del C3 (Centro de Competencias de Comunicación), de la Fundación Friedrich Ebert.
Bienvenida Relatora Especial para la Libertad de Expresión.
Esta agenda de trabajo que se te plantea en Uruguay es una agenda que no compete específicamente la realidad uruguaya, verdad?
CB – No. Los relatores especiales tenemos dos tipos de visitas a los países, el primero cuando hacemos actividades académicas en donde tenemos una invitación del país para promover, divulgar, estudiar ciertos temas generales y teóricos y el segundo cuando hacemos una visita concreta oficial al país, solo en el segundo caso podemos pronunciarnos sobre la realidad del país y hacer investigaciones in loco y ese tipo de cosas.
RU – Esta prevista esa instancia en algún cronograma relativamente inmediato de tu propia agenda?
CB – No. Inmediato no, inmediato le hemos pedido visita a México, le hemos pedido y nos han pedido visita a Perú, estamos pensando en una visita a algunos países del Caribe la comisión va a Jamaica en un par de semanas, pero no estamos pensando inmediatamente en una visita oficial a Uruguay.
RU – Y has recibido paralelamente, sin prejuicio de que estés en condiciones de reservar tu comentario algunas denuncias de la situación uruguaya?
CB – La relatoría recibe constantemente alertas y denuncias de todos los países, hay un par de casos que tiene la relatoría contra Uruguay, digamos, de personas que se han acercado a la OEA y han iniciado casos y algunas alertas pero digamos que no es uno de las alarmas de la región.
RU – Parecemos un país menos conflictivo?
CB – Si, si, si, es un país menos conflictivo, más civilizado
RU – Bien, y esta convocatoria, Pluralismo y Diversidad en que vas a basar tu ponencia?
CB – En la importancia de que dentro del derecho a la libertad de expresión se garantice que todas las personas especialmente los grupos marginados puedas ingresar al debate público, puedan participar de la radio, la televisión del debate colectivo.
RU – Hay experiencias espejos que podamos capitalizar
CB – La experiencia uruguaya es pionera, la experiencia uruguaya es realmente muy importante para el resto del continente.
RU – Que les parece, que te parece a ti que tenemos de diferencial y por lo tanto reproducible?
CB – Lo primero es, y que no es poco, es una discusión política muy civilizada, digamos, hay contradicciones, hay gente que está de acuerdo, más de acuerdo, menos de acuerdo pero tienen un escenario muy civilizado para poder llegar a acuerdos democráticos y eso no es poco. Dentro de ese escenario se produjo la ley de radios comunitarias, de radiodifusoras comunitarias que es probablemente la ley más importante del continente en esa materia, es una ley que realmente incorpora el pluralismo al sistema jurídico y establece un marco regulatorio para que esas otra voces puedan ingresar fácilmente y de manera ordenada al debate público.
RU – Estaríamos entonces funcionando casi bajo una lupa?
CB – Si. Son lo que nosotros afuera llamamos buenas prácticas que lo que hay que hacer es canalizar, estudiar qué paso, como llegaron allá, y sobre todo como se van a poner en prácticas y sobre todo que opinan los críticos, hay que recoger todas las voces y estudiarlas porque si funcionan como queremos que funcionen se convierten en una buena práctica para todo el continente, pero si claro lo estamos revisando porque es muy importante mirar como va a funcionar.
RU – Quienes serian los críticos de toda esta historia? Nosotros los propios Uruguayos que estamos generando además estos cambios y ver como los vivimos y hasta donde los respaldamos o la comunidad internacional, o ambos?
CB – No, yo creo que la comunidad internacional, particularmente la gente interesada en estos temas esta a la espera de ver lo que va a pasar, lo que me interesa mucho en esta visita a Uruguay es hablar con quienes podrían no estar de acuerdo con estas políticas y oír sus argumentos y por supuesto con los que están de acuerdo, con quienes las impulsaron y las lanzaron y sobre todo ver como las van a poner en prácticas.
RU – Y está generando una jornada de trabajo alternativa a este foro sobre Pluralismo y Diversidad?
CB – Si. Tenemos un taller mañana toda la mañana con periodistas sobre que es la relatoría, cual es la agenda de la relatoría, como le sirve la relatoría a los periodistas, como puede proteger sus derechos y luego una reunión con una serie de grupos especiales sobre temas de pluralismo y diversidad con periodistas, con gente de la radio sobre esta ley y sobre las distintas alternativas que existen de regulación de este tema.
RU – Dra. Catalina Botero a nosotros nos gustaría que conocieras más de la realidad de nuestro país y que pudieras opinar de ella, no desde tu propio enfoque sino también como relatora especial para la Libertad de Expresión, nosotros sabemos que hay algunos errores que aquí ya no se cometen pero nos preocupan otros, nos interesaría que nos hicieras una visita oficial entonces.
CB – Si. Tomo nota del interés, yo creo que Uruguay es un país muy interesante y al que valdría la pena hacerle una visita, lo que pasa es que hay países urgentes, en México el narcotráfico está matando a los periodistas y hay procesos de impunidad que son muy graves, muy graves; entonces hay que ir a México, hay que ir a Perú porque en Perú se están produciendo procesos muy complicados de cierre de espacios democráticos, dentro de las urgencias uno termina posponiendo países que tienen una enorme riqueza como Uruguay donde hay problemas pero tienen complejidades distintas por decirlo de alguna manera, pero yo estaré encantada de venir a Uruguay y voy a hablar con el gobierno y seguramente llegaremos a alguna propuesta.
RU – Bien. En este seminario, en este foro sobre Pluralismo y Diversidad a nivel del poder ejecutivo estarás compartiendo estrado con el Ing. Daniel Martínez, Ministro de Industria, Energía y Minería el estuvo con nosotros el jueves de la semana próximo pasada pero como tú ves es una cartera que implica responsabilidades diferentes, industria, energía y minería; hay quien dice que inclusive debiera dividirse a la hora de generar más de un ministerio para no recargar en una única persona o mejor dicho en un solo equipo, con que otras personas del gobierno tú te vas a vincular?
CB – Básicamente con el Ministro voy a estar en el seminario de esta tarde probablemente con el Vice Ministro Michelini, yo creo que son las dos personas del gobierno con las que es más importante conversar sobre estos temas.
RU – Bien. Nosotros te agradecemos este contacto esta mañana, nos habían pedido que no podían ser más de ocho minutos, estamos tratando de cumplir.
CB – No, muchas gracias a ti. Y por supuesto que cualquier opinión sobre lo que esta pasando en Uruguay que tu creas que es razonable o que los periodistas crean, o los comunicadores, o cualquier persona que ejerza su derecho a la Libertad de Expresión crea que es importante poner en conocimiento a la relatoría es tan fácil como buscarla en la página web, a través de la página de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y mandarnos un comunicado, incluso la persona que está encargada de hacer todas estas políticas de comunicaciones, que es una persona maravillosa, es Uruguaya, ella recibe todas estas comunicaciones y las discutimos y las metemos en los informes y entramos en contacto con la gente que tiene estas críticas, o denuncias, o alertas, entonces permíteme la propaganda a través de la página de la comisión interamericana.
RU – Con todo gusto.
CB – Estamos para servirles
RU – Quien es la persona que recibe esos materiales?
CB – Se llama Leticia Linn, es la encargada de toda la oficina de comunicaciones de la relatoría.
RU – Bien. Ha sido un gusto tenerte con nosotros, vamos a seguir tu reunión de mañana con los trabajadores de nuestro medio, porque nos va a interesar hacer un seguimiento de tu visita, darte nuevamente la bienvenida Dra. Catalina Botero, Relatora Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Muchas gracias
CB – Muchas gracias a Uds., un abrazo
Ley de radiodifusión comunitaria: Uruguay es «Un ejemplo de inclusión e igualdad»
El Foro sobre Pluralismo y Diversidad en la Radiodifusión, organizado por el Grupo Medios y Sociedad, y el Centro en Competencias de Comunicación de la Fundación Friedrich Ebert, destacó los logros de la nueva ley.
Tiempos del Sur 21/Nov/2008
«La ley es pionera en América Latina, son un ejemplo en términos de inclusión e igualdad». Así se refirió, Catalina Botero, la nueva Relatora Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en relación a la reciente ley que rige a la radiodifusión comunitaria en Uruguay. Botero, subrayó la importancia de distribuir las frecuencias con igualdad, asignar mal es «casi como que el Estado sostuviera que puede entregar los cupos de una universidad pública a quien quiera y a dedo». Según Botero, se trata de «bienes públicos» y no pueden ser distribuidos como le parezca al Estado, sin ningún tipo de criterio.
Durante el Foro sobre Pluralismo y Diversidad en la Radiodifusión, el ministro de Industria, Energía y Minería, Daniel Martínez, destacó la relevancia de contar con el más amplio espectro de opiniones; «democratizar la comunicación ha sido el norte del proceso que buscamos imprimirle a nuestro país», dijo. La nueva ley de radios comunitarias permite «eliminar a una serie de actores que se disfrazan de tales» y que no aportan a la independencia política y religiosa. Martínez, agregó que «lo fundamental de los medios debe de ser informar y no imponer, es la base de la sociedad que yo defiendo y peleo».
En el evento, la directora de la Unidad Reguladora de Servicios de Comunicación (URSEC), Alicia Fernández, se refirió al avance en materia de pluralidad y diversidad con el involucramiento de nuevos actores en la etapa de decisiones. La conformación de las comisiones honorarias que trabajaron en el tema y los procedimientos de audiencias y consultas públicas lograron en un plazo reducido resolver un problema complejo, cumpliendo con todos los procedimientos, señaló Fernández.
Actualmente se trabaja en la elaboración de un nuevo marco regulatorio que tenga en cuenta las tecnologías digitales. Según explicó Damián Loreti, consultor del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, «no se trata de regular tecnologías, sino de ver como las tecnologías influyen sobre procesos que atienden a conductas, mercados y modos de acercar a las comunidades al uso de los medios de comunicación». Uno de los objetivos es «aprovechar la utilización de la tecnología para un proceso de desconcentración» que fomente la democratización, el pluralismo y la diversidad.
El gobierno otorgó hasta el momento 38 permisos para gestionar emisoras de radio comunitarias, 12 en Montevideo y 26 en el interior del país. Los nuevos medios no pueden realizar proselitismo político partidario o religioso, pero sí están autorizados a vender publicidad y obtener recursos a través de donaciones y patrocinios.
ENTREVISTA A LA EXPERTA DE LA OEA, CATALINA BOTERO MARINO.
«La censura indirecta viola la libertad de expresión»
Por: Alejandro Alfie Diario Clarín.
FRONTAL. CUESTIONA EL USO ARBITRARIO DE LA PUBLICIDAD OFICIAL.
Catalina Botero Marino es colombiana, tiene 43 años y desde julio está a cargo del organismo que se ocupa de la libertad de expresión en la Organización de Estados Americanos (OEA). De gira por Argentina, cuestionó «la censura indirecta» en los países de la región, por el subsidio oficial que «premia a los amigos y silencia las voces críticas, mediante el uso arbitrario de la pauta publicitaria estatal y la entrega de frecuencias». A su entender, son temas que «violan la libertad de expresión», que deben abordarse en todo el continente junto al acceso a la información pública y al habeas data.
También señaló las situaciones que pasan en algunos países de la región, como «el asesinato de periodistas y la impunidad de esos crímenes». Los casos emblemáticos son México y Colombia, «donde el crimen organizado y el narcotráfico ejercen una presión muy fuerte sobre la prensa». Pese a ello, la especialista aseguró que las cortes supremas de Colombia y Perú son «un ejemplo para el resto del continente, ya que adoptan los estándares de la Corte Interamericana y los aplican a nivel interno». Botero Marino trabajó como magistrada auxiliar de la Corte Constitucional de Colombia hasta que la designaron en la relatoría.
El modelo para la región es Uruguay, que en el último año y medio desarrolló «la agenda más completa de libertad de expresión», dijo, ya que «dictaron una ley de acceso a la información y otra sobre radiodifusión comunitaria; están elaborando una ley sobre distribución de publicidad oficial, otra sobre radiodifusión general y una más para quitar los delitos de injurias y calumnias» vinculadas al periodismo. La relatoría funciona dentro de la Comisión Interamericana por los Derechos Humanos de la OEA, con sede en Washington. Se ocupa de asesorar a los gobiernos, comunidades académicas y organizaciones periodísticas, entre otras, para difundir los estándares internacionales sobre la libertad de expresión y defender ese derecho en la región.
Libertades y derechos.
La relatora especial para la Libertad de Expresión de la CIDH visitó el país y habló de prensa, gobiernos y sociedad civil.
Por Diego Martínez Página 12
Hace apenas diez años que Catalina Botero Marino se recibió de abogada, pero ostenta una extensa trayectoria académica y profesional. En julio la Comisión Interamericana de Derechos Humanos la eligió relatora especial para la Libertad de Expresión, cargo creado en 1998 para garantizar la protección y promoción de las libertades de pensamiento y expresión. Como el marco de visita académica a la Argentina le impide pronunciarse sobre temas concretos del país, preguntas y respuestas se formulan y responden en abstracto, como malabaristas que dialogan sobre un país imaginario.
-¿Cuáles son las prioridades de su agenda?
-Son cinco. Los asesinatos o agresiones violentas a periodistas y la lucha contra su impunidad. La criminalización, de la prensa y de la protesta social. La censura, directa o indirecta. El acceso a la información. Y el pluralismo y la diversidad. El Estado debe crear condiciones estructurales para que haya voces plurales y diversas. No basta con que haya muchos, porque pueden decir lo mismo.
-¿Qué riesgos trae aparejados una ley de radiodifusión sancionada durante una dictadura que prescribe el lucro como lógica dominante de los medios?
-En una sociedad en la que todos compiten en igualdad de condiciones no sería problemática. Sí cuando hay sectores que no pueden entrar al mercado. El Estado debe garantizar que todos los sectores puedan acceder a los medios, que no haya monopolios en la propiedad, en el dominio de la audiencia y en el discurso. Eso se garantiza a través de leyes que premien a sectores no tradicionales, a minorías culturales o raciales, que establezcan franjas especiales para quienes no pueden entrar en el mercado comercial, que promuevan medios con información pública que los particulares en general no producen porque no es rentable.
-¿Es un problema generalizado en América latina?
-Hay honrosísimas excepciones, como Uruguay.
-¿Puede actuar la Relatoría frente a grandes grupos económicos que utilizan sus medios para extorsionar a sus adversarios?
-El mandato es el de garantizar que los Estados creen condiciones estructurales para que haya diversidad y pluralismo. Si existen y los Estados pueden responder a las críticas, hablar de extorsión es desproporcionado. Si no existen es porque el Estado no supo generarlas.
-¿Qué riesgos corre un país cuando se renuevan automáticamente las licencias de televisión sin exigir ninguna contraprestación?
-Las licencias y las frecuencias no les pertenecen al Estado ni a los medios sino a la sociedad. Cuando se entrega en concesión un bien social tiene que haber una contraprestación. Lo contrario sería disponer de bienes como si fueran regalados. La asignación de frecuencias es un tema de altísima relevancia: es el único medio a través del cual garantizar que exista pluralismo, un debate desinhibido, abierto.
-Si la renovación se consumó a cambio de nada, ¿a qué instancia se le debe exigir rever esa decisión?
-Es un problema de cada Estado, de derechos adquiridos. El Estado debe tener leyes de radiodifusión de manera tal que la asignación sea un asunto debatido en audiencias públicas. Debe haber criterios plurales para que toda la sociedad se enriquezca en ese proceso.
-¿Es el Congreso el lugar más idóneo para dar la discusión?
-Lo debe resolver cada Estado. Lo importante es respetar los principios: asignaciones no discrecionales, sin influencias partidistas, hechas por un órgano independiente del Ejecutivo…
-Mucho menos el Ejecutivo mismo.
-O, si lo hace, que sea en un proceso transparente, con control, reglas claras, que no discriminen. Una política que establezca como requisito el mayor capital discrimina a quien no lo tiene. Se necesitan garantías de inclusión. Son principios básicos que existen en Europa, Canadá, Uruguay. El gran salto institucional de un gobierno es aceptar ese reto. Lo más grave es el proceso de digitalización que se viene. Hoy las frecuencias funcionan a través del espectro electromagnético, que es finito, pero el dividendo digital es infinito. El gran reto de Estados, gobiernos democráticos y sociedades civiles comprometidas es formular reglas para que no se monopolice el proceso de digitalización. Es algo que nadie parece saber porque se esconde detrás de problemáticas técnicas, pero es lo mismo: asignación de frecuencias.
-Desde 1999 todos los gobiernos argentinos ratificaron su compromiso de despenalizar los delitos de calumnias e injurias, pero ninguno cumplió con su palabra, y la sugerencia se convirtió este año en una orden de la Corte Interamericana, en el caso Kimel. ¿Por qué la clase política se niega a renunciar a la posibilidad de perseguir periodistas con el Código Penal?
-Es un fenómeno extraño. Pese a que no se condena a los periodistas, los funcionarios no quieren perder esa herramienta, como si temieran quedarse desnudos frente a la omnipotencia de la prensa. Es falso. Nadie puede estar inerme frente a acusaciones injustas, pero cualquier medida de control a la prensa debe generar el menor costo sobre la libertad de expresión. Una medida que tenga un efecto inhibitorio, a sí sea mínimo, debe replantearse. Despenalizar las calumnias y las injurias no significa caer en el reino de la mentira o el insulto. Existen mecanismos de protección del honor y la intimidad mucho más democráticos: las sanciones civiles proporcionadas. La utilización del derecho penal inhibe la crítica y la investigación. Si las figuras de calumnias e injurias no se aplican, no deberían existir.
-¿Qué tan útiles son las leyes de acceso a la información cuando en la cultura política perduran prácticas de ocultamiento y poca transparencia?
-El primer efecto de una ley o una sentencia judicial es que impacta en la cultura. Suele haber una idea de que el funcionario decide si entrega o no la información en virtud de su propio juicio, pero cuando hay una ley y jueces independientes, la cultura cambia rapidísimo. Claro que no basta con la ley, hacen falta también procesos de capacitación…
-Y que los periodistas las conozcan.
-Los periodistas no tienen incorporado el lenguaje de los derechos. Cuando piden información plantean una exigencia política o moral, pero no usan la carta del derecho. Hacen falta procesos de capacitación, medidas de implementación, determinar quién custodia y administra información.
-La Corte argentina dictó una acordada para que un tribunal garantice el principio de publicidad, pero fue burlada. ¿A quién recurrir cuando los encargados de garantizar los principios los violan?
-La Corte argentina es una corte estrella en el continente en materia de aplicación de estándares internacionales. El gran giro que dio el derecho constitucional en Europa desde la Segunda Guerra y en América latina tras las dictaduras es que los Estados no se centren en defender la autoridad, el orden y la moral sino a los ciudadanos, y la Corte está dando ese giro. La acordada es muy importante. Si no se cumple habrá que agotar los mecanismos internos para que el sistema interamericano estudie el caso.
-La publicidad oficial sigue siendo una herramienta para premiar o castigar. ¿Cuál es el método más idóneo para distribuirla?
-No se debe confundir pauta publicitaria con subsidios. La pauta es la información que el Estado necesita publicar para cumplir sus funciones. El Estado debe llegar a cada audiencia sin discriminación, con reglas claras, mediciones responsables, no utilizar la pauta de manera discrecional como ocurrió en el caso de (Neuquén contra) el diario Río Negro.
-¿Existen en Sudamérica reglas claras o todo es tácito y arbitrario?
-Todo es tácito. Sólo algunas provincias y municipios están haciendo el ejercicio. Instalar el tema es costoso. Hay estados de cosas que una nueva distribución de la publicidad va a afectar y los Estados prefieren no dar la pelea. Sólo la dan quienes llegaron a través de procesos democráticos y tienen mucha fuerza y capital político. No es fácil. Los medios que han recibido publicidad van a sentir que se afectará su statu quo y las agencias estatales que han logrado mantener más o menos tranquila a la prensa también se van a molestar. La regulación de la publicidad oficial es un tema aún más difícil que una ley de acceso a la información.
-¿Es un buen momento para avanzar en estos temas? Distintos gobiernos internalizaron, al menos en sus discursos, principios de derechos humanos.
-En materia de libertad de expresión no estamos en el peor lugar del mundo ni en el peor momento de la historia del continente. Las sociedades civiles se han fortalecido, la conciencia democrática es generalizada, hay vigorosos debates ideológicos. Pero la historia de la humanidad muestra que no siempre vamos hacia arriba sino en espiral.
-Bajamos demasiado seguido.
-Bajamos, volvemos, nos estancamos. Estamos en un buen momento pero siempre hay riesgo de retroceder. Por eso hay que estar absolutamente vigilantes, incluso en los Estados que parecen más civilizados y con culturas democráticas más asentadas y arraigadas.
Fuente: Presidencia de la República. http://www.presidencia.gub.uy