Treinta y cuatro años después, el polifacético Fernando Parrado decidió revivir los días en que se enfrentó él, y un grupo de amigos, a la muerte segura.
Parrado es uno de los pocos que sobrevivió a la tragedia de los Andes y cruzó la cordillera para salvarse él y sus compañeros. Ahora escribió un libro, el primero relatado por uno de los protagonistas del hecho ocurrido un viernes 13 de octubre de 1972 cuando un grupo de jóvenes uruguayos viajaban rumbo a Chile para jugar un partido de rugby.
En ese avión viajaban además amigos y familiares de los deportistas.
Debido a problemas atmosféricos, el piloto de la nave decidió modificar la ruta aérea y se estrellaron contra un pico de la cordillera, llevando a que 16 permanecieran durante 72 días varados en la más adversa situación climática, en plena cordillera de los Andes.
La gran mayoría de los pasajeros murieron en el accidente, se congelaron y fueron despedazados lentamente por los sobrevivientes, transformándose en la única alternativa alimenticia para permanecer vivos.
Los pocos alimentos que habían quedado luego del accidente fueron consumidos a la semana. “Una barra de chocolate nos duró tres días –relata Parrado en su libro- y no nos quedó más remedio que comenzar a comernos los cadáveres”.
Parrado brindó una nota a un periodista inglés y en ella señala que él mismo dio la orden de comenzar en primer lugar a despedazar al piloto para comerlo. “Algunos piensan que yo tenía odio al piloto por el accidente” dijo en la entrevista. “Era cierto que fue su culpa pero me sentía mejor comenzando con el piloto del avión porque no lo conocíamos como a los demás” explica Parrado.
En el accidente fallecieron entre otros la madre y la hermana de Fernando Parrado y entre los sobrevivientes se había establecido un pacto de no comérselas.
Cuando llegó el momento de despedazarlas, Parrado tomó la iniciativa de cruzar la cordillera en busca de ayuda y tras 10 días de caminata por la nieve y las pendientes llegó a Chile. Algunos señalan hoy a la distancia que si hubiera optado caminar hacia Argentina, habría llegado a la civilización muchísimo antes.
Los cuerpos de la madre y hermana de Parrado quedaron intactas y recibieron sepultura en las cumbres cordilleranas.
Parrado dijo hoy que no tiene remordimiento por lo hecho en aquellos fatídicos días y responde en la entrevista con el periodista inglés que está seguro de no haber cometido ningún delito al practicar el canibalismo.
“Te garantizo que el 100% de la gente haría lo mismo que nosotros hicimos en la montaña. Teníamos sólo dos opciones: o te morís de hambre o te comés a tus amigos”, sentencia.
Por la tragedia de los Andes se escribió un libro y se filmaron varios documentales y una película.
El libro fue escrito por Piers Paul Read y se llamó “Viven” (Alive). Este best seller sirvió para una película en la que el actor Ethan Hawke fue uno de los protagonistas.
Ahora es diferente. Es el mismo Fernando Parrado que con puño y letra revive los 72 días en las montañas. El libro se llama Milagro en los Andes. Su versión en inglés es Miracle in the Andes, siendo el tramo más desgarrante y terrible cuando relata la decisión de comerse a los cadáveres del siniestro.